El 44% de los departamentos legales ya utiliza inteligencia artificial (IA) generativa, frente al 28% que la utilizaba en 2024 y al 20% en 2023, según se desprende de la segunda parte del informe anual 'The General Counsel Report 2025: The Data Guardian in Chief', elaborado por FTI Consulting y Relativity.
El estudio analiza el ritmo de adopción de tecnologías emergentes, concretamente, la IA generativa, en un contexto marcado por el aumento de riesgos y la sobrecarga de trabajo en los departamentos jurídicos.
Esta tecnología se aplica, principalmente, en tareas como la investigación legal, el 'e-discovery', la revisión documental y el análisis contractual.
No obstante, su uso sigue siendo, en gran medida, experimental o limitado a procedimientos de bajo riesgo, y siempre bajo supervisión humana.
Además, el 65% de los departamentos jurídicos prevé invertir en nuevas herramientas a lo largo del próximo año, figurando entre las prioridades soluciones de gestión del ciclo de vida contractual (CLM); gestión legal corporativa; gestión de casos; y automatización de procesos.
Sin embargo, el 75% reconoce no disponer de una hoja de ruta tecnológica definida, lo que dificulta la planificación y la asignación eficiente de recursos presupuestarios.
DÉFICIT EN OPERACIONES LEGALES
Un factor que agrava esta situación es que el 71% de los departamentos no cuenta con un responsable de operaciones --exclusivamente para su área--, a pesar de que se reconoce ampliamente el valor de esta función para coordinar presupuestos, tecnología y eficiencia interna.
Esta carencia, sumada al incremento de trabajo en la evaluación e incorporación de herramientas, subraya la necesidad de profesionalizar la gestión operativa del área jurídica.
El 100% de los departamentos encuestados afirma haber experimentado un aumento en los niveles de riesgo y carga de trabajo durante el último año, y el 85% anticipa que esta tendencia se intensificará.
Como respuesta, el 79% ha incrementado la contratación de despachos externos y el 26% ha elevado sus presupuestos legales.
Además, el 56% ya utiliza algún tipo de automatización, especialmente en tareas repetitivas como la elaboración de acuerdos de confidencialidad o los procesos de incorporación de proveedores.
En conjunto, el informe confirma que, si bien los departamentos jurídicos están avanzando en su transformación digital, aún enfrentan obstáculos estructurales y estratégicos considerables.
La ausencia de planificación tecnológica, la creciente presión operativa y las reticencias frente a la automatización requieren un enfoque "más proactivo, estructurado y profesionalizado, con el fin de asegurar que la tecnología se convierta en una ventaja competitiva, y no en un factor de riesgo adicional", se ha referido en el estudio.
"El aumento del riesgo y de la demanda en tantos frentes distintos seguirá determinando la forma en que los departamentos jurídicos abordan y aprovechan la tecnología", ha asegurado Javier García-Chappell, Managing Director de FTI Consulting.