El presidente del Gobierno, ha clausurado la IV Conferencia sobre la Financiación para el Desarrollo de la ONU que se ha llevado a cabo en Sevilla durante la última semana, que a su juicio "ha mantenido viva la llama de la cooperación aún cuando muchos quieren apagarla" y la han protegido del "cinismo, el egoísmo y el olvido".
Sánchez, que ejercía como anfitrión, ha vuelto a lanzar un mensaje velado a Estados Unidos -principal ausente de la cumbre- por su intención de recortar sus aportaciones a los países en desarrollo. "La comunidad internacional no va a rendirse ante el desaastre ni ceder terreno al desencanto", ha indicado.
En un breve discurso que ha puesto el broche final a cuatro días de debates y plenarios, defiende que el verdadero valor de la Conferencia no ha sido lo que se ha discutido sino lo que los países participantes están "dispuestos a hacer" a partir de este momento.
"Hoy no solo estamos cerrando una conferencia, estamos abriendo un nuevo camino y lo estamos haciendo trabajando en algo que es mucho más poderoso que el discurso de odio y la confrontación que otros parecen tener", ha lanzado en la misma línea.
Considera que los participantes en la Conferencia de Sevilla están cargados de razón y "en el lado bueno de la historia" y considera que cuando pasen los años recordarán este momento con orgullo por haber hecho "lo correcto" cuando era "crucial" hacerlo, ha seguido.