El terremoto político desatado en Ferraz tras el escándalo que salpica a Santos Cerdán ya tiene consecuencias, también para Jaén. El jiennense Juan Francisco Serrano, diputado en el Congreso por la provincia y exalcalde de Bedmar, deja de ser adjunto a la Secretaría de Organización del PSOE y, por tanto, uno de los hombres fuertes del aparato federal.
Serrano, hasta ahora mano derecha de Cerdán, ocupaba un puesto de peso en la dirección del partido como primer adjunto en el área de Organización. Su salida se consuma tras la decisión del secretario general, Pedro Sánchez, de sustituir por completo al equipo del navarro, implicado en un presunto caso de cobro de mordidas en adjudicaciones de obra pública.
A partir de este sábado, la nueva estructura de Organización estará liderada por la valenciana Rebeca Torró Soler, actual secretaria de Estado de Industria y exconsellera del Gobierno de Ximo Puig. Torró será la nueva ‘número tres’ del partido y asumirá un rol central en la maquinaria interna del PSOE, que hasta ahora desempeñaba Cerdán.
Como principales adjuntos de Torró estarán la almeriense Anabel Mateo Sánchez, que será secretaria de Coordinación Territorial, y el sevillano Francisco J. Salazar Rodríguez, quien compaginará su nuevo rol con el de secretario de Acción Electoral y Análisis.
Cierra el equipo el madrileño Borja Cabezón, que seguirá como secretario de Transparencia y Acción Democrática, y que ha formado parte del equipo interino que ha dirigido la Organización durante estas semanas convulsas.
Aunque fuentes del PSOE aseguran que "no habrá caza de brujas", la salida de Serrano simboliza el viraje que Sánchez pretende dar tras la caída de Cerdán. La renovación no se limitará a su círculo más próximo, pero es evidente que los dirigentes más alineados con él, como el propio Serrano o Javier Cendón (León), han quedado fuera del nuevo diseño.
Desde el PSOE de Jaén aún no se han producido reacciones oficiales, aunque no se descarta que se pida más peso para las federaciones que, como la jiennense, han sido fieles al proyecto y al liderazgo de Sánchez incluso en momentos críticos. La salida de Serrano supone una pérdida de influencia para la provincia en el núcleo duro del partido, donde había conseguido consolidarse tras años de trabajo en Madrid.
El Comité Federal que se celebra este sábado servirá para oficializar todos estos cambios, en una jornada que marcará un antes y un después en el engranaje interno del PSOE. Jaén, que hasta ahora tenía voz y voto en las decisiones estratégicas del partido, observa con atención esta nueva etapa en la que, de momento, pierde peso en Ferraz.
