Por las calles del barrio de La Magdalena aún resuenan ecos de incredulidad y tristeza. Muhammad Munir, comerciante, padre, vecino, ciudadano de origen pakistaní, fmurió el pasado 29 de junio en su establecimiento por una agresión con arma blanca. La indignación no ha tardado en aflorar. La Asociación de Hermanos Pakistaníes en Jaén, junto con otros colectivos sociales, se ha movilizado en las calles. El pasado viernes, la Plaza de las Batallas acogió una concentración dondepidieron justicia.
Allí, con pancartas, lágrimas y fotografías de Munir en alto, exigieron que este crimen no quede impune. Que se investigue con rigor, y que se llegue hasta el fondo. Porque Munir no era solo un comerciante, era un vecino querido, “perfectamente integrado en el barrio”, como subrayaron los convocantes. Su pérdida no es solo una tragedia personal, sino una herida colectiva.
Un crimen que rompió la calma
Fue a las 19:25 cuando se recibió una llamada de auxilio. Munir había sido apuñalado en su propio negocio. Presentaba también un traumatismo craneoencefálico. Fue trasladado con urgencia al Hospital Neurotraumatológico. Murió esa misma noche. Tenía 57 años.
Desde el primer momento, la Policía Nacional activó el protocolo correspondiente. Las investigaciones, dirigidas por el grupo UDEV-Personas de la Brigada de Policía Judicial y Científica de la Comisaría de Jaén, condujeron rápidamente a la detención de un joven de 20 años como presunto autor del apuñalamiento. Sin embargo, tras pasar a disposición judicial, fue puesto en libertad con cargos y medidas cautelares. La decisión ha desatado una profunda inquietud.
El subdelegado del Gobierno de España en Jaén, Manuel Fernández, ha asegurado que la Policía Nacional "no va a dejar de trabajar" hasta esclarecer el caso. Fernández se acercó a la concentración, donde pudo conversar con familiares y allegado de la víctima, además de con representantes de la Asociación de Hermanos Pakistaníes y la Comunidad Islámica en Jaén.
Posteriormente, a preguntas de los periodistas, explicó que les ha trasladado el mensaje que, a su vez, "le ha hecho llegar el comisario accidental" del CNP, para que "tengan claro que la policía está a su disposición". "Me lo ha trasladado así, su compromiso de poner toda la carne en el asador, no dejar de trabajar hasta que el delito esté esclarecido", destacó el subdelegado, quien ha instado también a avisar y denunciar "a la más mínima".
Explicó que los agentes encargados del caso "están desarrollando diferentes líneas de investigación". "Algunas más complejas que otras, algunas necesitan más tiempo que otras, como sabéis. Pero doy fe de que se está avanzando de forma muy importante en la investigación", señaló.
Pero la voz de protesta también trae una denuncia aún más inquietante. Silvia de la Torre, secretaria general de Comisiones Obreras (CC OO) en Jaén, declaró que el crimen de Munir “no es un hecho aislado”. Según el colectivo Hermanos Pakistaníes, en los últimos meses se han producido otros dos apuñalamientos contra comerciantes pakistaníes en la capital, aunque estos sobrevivieron.
Más grave aún: Munir ya había sido víctima de agresiones anteriormente. “La violencia contra los inmigrantes es inaceptable”, afirmó De la Torre, quien reclamó la intervención urgente de la Fiscalía. “Puede tratarse de un delito de odio y discriminación”, señaló con contundencia.
Desde CC OO y otros colectivos como Jaén Acoge se ha pedido una investigación a fondo y con celeridad. “Somos voces unidas en un esfuerzo por concienciar a la ciudadanía de la necesidad de convivir en paz y armonía, y con el máximo respeto hacia la diversidad. Hay que prevenir que vuelvan a repetirse tan trágicos sucesos”, declaró la organización.
