El Senado de Estados Unidos ha reclamado este domingo más "acciones disciplinarias" contra el Servicio Secreto, cuando se cumple un año del intento de asesinato al actual presidente del país, Donald Trump, mientras daba un mitin electoral en Pensilvania, y después de que seis de sus agentes fueran suspendidos la semana pasada.
El Comité de Seguridad Nacional y Asuntos Gubernamentales de la cámara ha emitido un informe en el lamenta que "ninguna persona ha sido despedida", después de que el Servicio Secreto afirmase la semana pasada haber suspendido a seis de sus empleados por este suceso por períodos de entre diez y 42 días sin sueldo.
El documento, difundido por el presidente de este comité, el senador republicano Rand Paul, recoge que éstos seis agentes "recibieron castigos demasiado débiles en comparación con la gravedad de sus fallos". "Más de seis personas deberían haber recibido acciones disciplinarias como resultado de sus acciones o inacciones el 13 de julio de 2024", añade el texto.
El organismo responsabiliza al Servicio Secreto por una "cascada de fallos evitables" que condujeron al ataque contra el entonces candidato a la Presidencia estadounidense, cuando un joven de 20 años disparó contra Trump, que acabó con la oreja sangrentada, mientras que dos asistentes también resultaron heridos y un tercero murió.
En particular, el comité señala que estos errores "asombrosos" habrían "permitido que el entonces expresidente fuera asesinado", y apunta a la falta de comunicación estructurada dentro del Servicio Secreto como la principal causa de las negligencias cometidas durante el acto electoral, si bien también señala una falta de coordinación entre el organismo y las agencias policiales estatales y federales presentes en evento.
El Senado ha publicado el documento coincidiendo con el aniversario del ataque contra el inquilino de la Casa Blanca, que lo ha recordado en un comunicado en el que ha asegurado que "Dios me salvó aquel día con un propósito justo: devolver la grandeza a nuestra amada República y rescatar a nuestra nación de quienes buscan su ruina".
"Un año después del atentado contra mi vida en Butler, nuestro país se encuentra en medio de una nueva edad de oro", ha celebrado en una nota en la que ha "rendido homenaje a" la única víctima mortal, Corey Comperatore. "Murió como un héroe, y le estaremos eternamente agradecidos por su inspirador amor, valor y fidelidad", ha señalado.
Asimismo, el presidente estadounidense ha mencionado a los médicos y aquellos que intervinieron para proteger a sus seguidores porque "defendieron nuestra República durante una de las horas más oscuras de nuestra nación (y) representan lo mejor de nuestra nación. Siempre estaremos en deuda por su amabilidad y compasión".
En cambio, ha asegurado que "la historia recordará al aspirante a asesino por su cobardía y su fracaso", advirtiendo de un incidente que estuvo a punto de "acabar con mi vida y silenciar nuestro movimiento para restaurar la grandeza de Estados Unidos".
"Al conmemorar un año desde los terribles acontecimientos del 13 de julio de 2024, reafirmamos que el espíritu estadounidense siempre ha triunfado y triunfará sobre las fuerzas del mal y la destrucción", ha declarado.