Cada viajero español acumula tras las vacaciones una media de 71 euros en divisas extranjeras, lo que supone unos 341 millones de euros en dinero sobrante que no se volverá a utilizar, según desvela un estudio elaborado por Visa Europe.
Tal y como explica el informe, tras las vacaciones, una parte de los turistas españoles cambia sus divisas sobrantes, pero otros muchos se olvidan de hacerlo, y acaba siendo dinero perdido para ellos.
No obstante, Visa Europa considera que las tarjetas y los pagos electrónicos pueden ayudar a reducir esa cantidad de dinero que finalmente no se vuelve a utilizar y al que puede darse un mejor uso.
Los datos recabados por Visa Europe indican que al pagar por bienes o servicios en España, un tercio (31 %) de los viajeros españoles prefiere utilizar su tarjeta de débito, mientras que en el extranjero, este porcentaje se reduce hasta solo el 18 %.
Estos datos, sumados al pago en efectivo -que es usado por un 44 % de los viajeros españoles en el extranjero-, explican la cantidad de dinero sobrante en divisas de otros países que hay tras las vacaciones.
Aunque el efectivo robado o perdido no se puede recuperar, el 45 % de los viajeros españoles se siente seguro utilizando efectivo en comparación con otros medios de pago.
Sólo un 25 % de los viajeros españoles se siente cómodo pagando con tarjeta de débito, según apunta la directora general de Visa Europe en España, Carmen Alonso, que no obstante, ha precisado que los titulares de tarjetas Visa Europe realizaron más de 1.000 millones de operaciones en toda Europa en sus viajes en 2014.
"Utilizar la tarjeta de crédito o de débito en el extranjero ofrece múltiples ventajas a los viajeros, ya que les permite tener un mayor control de sus finanzas cuando están lejos de casa, les proporciona seguridad constante, evita que acumulen dinero en divisas extranjeras en su regreso y les da la posibilidad de poder sacar dinero en efectivo en casi 400.000 cajeros en toda Europa cuando sea necesario", ha concluido Alonso.