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Parando letras

Piezas de puzle

Pero ya sabemos que así el puzzle no nos dirá nada y siempre nos quedarán las ganas de haberlo querido terminar

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¿Cuántas veces hemos huido sabiendo que ese no es nuestro lugar? Que por más que lo forcemos, las piezas de puzzle vienen hechas unas para otras y éstas tan solo se fusionan con aquellas que vienen preparadas de fábrica para hacerlo. Lo que no podemos pretender es encajar en un sitio que no es el nuestro. Alterar nuestro alrededor por querer ocupar una plaza que no nos pertenece. Que somos solo piezas en este juego y a quién no le valga nuestra pieza, es decir, nosotros mismos, no dudará en desecharnos. Y llegará ese momento en el que creamos ser un don nadie. En el que querremos abandonar la partida y dejar el puzzle incompleto. Sin saber de dónde venimos y mucho menos a dónde iremos. Pero ya sabemos que así el puzzle no nos dirá nada y siempre nos quedarán las ganas de haberlo querido terminar. Ten por seguro que más tarde o más temprano terminamos por encontrarnos. Cuando estamos más perdidos o cuando menos lo esperamos, alguien te indica cuál es tu sitio. Te enseña con el paso de los d-años, que la palabra hogar no depende del sitio, sino de la compañía y que esa compañía es la que encaja contigo a la perfección. Tenemos que ser pacientes y a veces es necesario dejar de buscar para que eso que deseas llame a tu puerta de forma inesperada. Entonces, cuando llega, comienzas a darle sentido a todo lo que está a tu alrededor. Porque encontrar aquella pieza que te complementa, te da la posibilidad de descubrir otras nuevas para seguir formando una cadena de personas, algo similar al hilo rojo invisible que dicen que nos guía el destino. Y en ese mismo instante somos, mañana nadie sabe si seremos, por eso mismo debemos intentar conservar todas esas piezas que tengan cavidad en nuestro puzzle, sabiendo que llegará el día en el que las curvas de este viaje llamado vida, haga que alguna de estas piezas se caiga del tablero. Quizás nadie vuelva a ocupar su lugar, pero siempre quedará el recuerdo de lo que fuimos.

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