Salud aclara que todo está dentro de la normalidad
A pesar de que ni la Delegación Provincial de Salud ni el Colegio Oficial de Farmacéuticos hayan detectado ningún repunte en el número de niños afectados por una plaga de piojos de la ciudad, sí que es cierto que, aunque ya esté bajando considerablemente el número de casos (la mayoría se dieron durante octubre y noviembre) la presencia de estos indeseables huéspedes que suelen alojar en la cabellera de los más pequeños ha provocado que las farmacias jerezanas hayan realizado una buena caja en cuanto a venta de todo tipo de productos (champú, lociones,...) que atajen y prevean la aparición de estos insectos.
En la farmacia de Porvera comentaron que “los piojos no entienden de estaciones” y los clientes no miran precios cuando “llegan aquí desesperados en busca de un producto que termine con los piojos”. Asimismo, tanto en la farmacia del licenciado Gregorio Alonso (calle Corredera) como en la de la plaza del Caballo apuntaron que “ya ha pasado la racha”, aunque sí reconocieron que los productos antiparasitarios se han vendido bastante, sobre todo, a modo de prevención. Donde todavía se siguen adquiriendo estos productos es en la farmacia central (calle Larga) donde afirmaron que “aquí se está vendiendo mucho” aunque sin amenazar a las existencias. Asimismo, en el establecimiento del licenciado Juan Zajara (calle Giralda) también se ha producido un repunte en la venta de estos productos.
La mayoría de colegios consultados corroboraron ayer la existencia de piojos en clase aunque en cifras similares a las años anteriores, por lo que ya han enviado distintas misivas a los padres para recordarles que tomen precauciones y “si su hijo tiene piojos, lo ideal es se quede en casa los tres días (período de incubación de los huevos) que es lo que debe durar el tratamiento para que la medida sea efectiva. Toda la familia debe ser tratada (padres y madres también) o por lo menos utilizar los champús preventivos. Se debe de cambiar la ropa de la cama y lavar cuidadosamente los cepillos y peines”, añaden.