La Coordinadora de Trabajadores el Metal (CTM) ha lamentado que CCOO y UGT hayan vuelto a negociar el convenio del sector del metal “de espaldas a los trabajadores”. “Ni se les pide opinión de mejoras” del documento, “ni se vota para aceptarlo”, advierte, y remarca que “tampoco se les preguntará a los empleados si quieren ir a la huelga”, planteada por las dos organizaciones mayoritarias los días 17 y 18 de junio e indefinida a partir del 23 si Femca no recula.
CTM considera, en cualquier caso, que la ruptura con la patronal es una oportunidad para “reivindicar con más fuerza” mejoras laborales, dada “la mayor carga de trabajo” existente, con uno de los mejores momentos en el sector naval y off shore, más todavía en relación a 2021, cuando el sector llevó a cabo, jaleado por la coordinadora, las movilizaciones más intensas desde los años ochenta. “Navantia y Dragados no solo tiene una gran carga de trabajo, sino que Dragados ha invertido en Campamento (San Roque) y Puerto Real, y Navantia ha comprado dos astilleros británicos”, añade.
Por ello, pregunta si son las empresas tractoras las que presupuestan los pedidos por debajo del precio e impiden cumplir el convenio o son las auxiliares las que pretenden obtener mayores beneficios.
Sea como fuere, CTM insta, por un lado, a negociar el nuevo texto a la par que el de Navantia y que el acuerdo con la patronal “se fiscalice y no acabe siendo papel mojado”.