Los participantes en la huelga del metal en Cádiz han decidido, tras finalizar la marcha iniciada en la rotonda San Severiano frente a la sede de la Femca, poner rumbo a la sede de UGT para protestar contra el preacuerdo entre patronal y ese sindicato y exigir la dimisión de Antonio Montoro.
La marcha, que ha transcurrido sin incidencias y ha reunido a en torno a unas 5.000 personas, ha concluido con el compromiso de “no dar un paso atrás”. Antonio Muñoz, responsable del metal de CGT, se ha dirigido a la multitud para felicitarse por la “espectacular” respuesta a la convocatoria de este miércoles y advertir de que “tomaremos las calles todos los días” que sea necesario hasta conseguir un convenio “digno”.
Muñoz también ha remarcado que, “si perdemos dinero” por la huelga indefinida, “perderán dinero todos” y ha asegurado que “ni Montoro ni mil Montoros nos van a arrebatar la dignidad y los centros de trabajo”.