Después de que el Ayuntamiento haya trasladado a la Fiscalía la justificación de las subvenciones recibidas por parte de la Asociación de Atención al Alcoholismo Arca, su presidente, Alberto Matilla, hacía pública sus sospechas de que existen “connotaciones o matices políticos” en lo ocurrido. Para ello aclara que una de las ex trabajadoras de Arca que ha denunciado la situación ante el Ayuntamiento es “a día de hoy presidenta de la entidad alternativa Asista, que acaba de empezar a funcionar y hace una labor similar a la de Arca”. A lo que añade que “son afines a la ideología del equipo de Gobierno”.

Asimismo, denuncia que la misma persona que lo denuncia “era quien montaba los expedientes que se trasladaban al Ayuntamiento para justificar las subvenciones”. A su juicio, “son muchas casualidades”.   Critica que el Ayuntamiento “no se haya puesto en contacto con nosotros, nos amenacen con la Fiscalía, creando sombras de duda de nuestra labor”.

Matilla añade que “el convenio con Arca ya lo quisieron suspender en diciembre, a través de una comunicación de Asuntos Sociales”. Al final, a través del Pleno, con el apoyo de la oposición se aprobó renovar el convenio.  El presidente de la asociación mantiene que “no les gusta que defendamos los derechos de las personas que necesitan atención, por lo tanto yo me pregunto si esta es la política social que iba a desempeñar este equipo de Gobierno”.  

Desde su punto de vista, la única “prioridad es investigar sin contactar y mandar a la Fiscalía. Esta acción del Ayuntamiento me parece ruin, me parece una mezquindad”. Defendió la labor realizada por Arca “que se dedica a la atención de personas. Es el único centro especializado, tenemos convenios con la UCA, y esto que nos están haciendo no es justo”.

El portavoz de la Asociación de Atención al Alcoholismo mantiene que esta “amenaza” con trasladar el expediente a la Fiscalía es en respuesta a la demanda “de que nos abonen la deuda de 100.000 euros que mantienen con nosotros, que tenemos que pagar todas las nóminas que se deben”.  En cuanto a la justificación de las subvenciones, señala que “el Ayuntamiento tiene un sistema de fiscalización a través de Servicios Sociales y no nos han dicho nada al respecto”. Cuando les han pedido información, afirma que “siempre se ha solventado”. 

Según Matilla, “la situación en la que estamos hemos tenido que desmantelar todos los servicios de profesionales. Estamos sometidos a la asfixia económica con la intención de que desaparezca la asociación”.