“Hay que sentarse a hablar”. Así apoyaba el alcalde de Cádiz, José María González, el escrito remitido por el Foro de Participación Ciudadana que tendía la mano a las asociaciones de vecinos para acordar un único reglamento de participación, en base al informe del secretario municipal sobre el texto aprobado por el pleno municipal y que partía de la Federación de Asociaciones de Vecinos 5 de Abril.
No obstante, el regidor asumía con una sonrisa que se le pida valentía a los grupos políticos porque “valentía es lo que se traduce después de poner sobre la mesa un reglamento alternativo, en consonancia con la nueva legislación andaluza”. Considera que han sido valientes porque ni se han sentado “a vérnoslas venir ni nos hemos puesto de lado. Nos hemos puesto de frente y acometido con la máxima entereza y responsabilidad”.
Afirma que es cierto “lo que dicen de que hay que sentarse a hablar. No queríamos hacer otra cosa más que poner sobre la mesa la necesidad de modificar un reglamento de participación que la Junta te va a decir que se va a tener que modificar dentro de un año o año y medio”.
Al alcalde le gustaría zanjar este asunto: “Me gustaría enterrar esto. Queremos a las asociaciones de vecinos. Nos parecen unos actores imprescindibles en la vida social y económica de la ciudad, pero no son los únicos elementos que forman parte del tejido asociativo de la ciudad. Todos ellos tienen derecho a participar de ese reglamento en igualdad de condiciones”.
Explicó también que las asociaciones de vecinos ya están organizadas, estructuradas, “con sus mecanismos de conducta y tendrían una posición incluso preferente respecto a otras organizaciones que no tienen esa forma orgánica de funcionar”.
“Hay que sentarse a hablar”. Así apoyaba el alcalde de Cádiz, José María González, el escrito remitido por el Foro de Participación Ciudadana que tendía la mano a las asociaciones de vecinos para acordar un único reglamento de participación, después de que, según el colectivo, un informe del secretario municipal indique que el texto aprobado por el pleno municipal y que partía de la Federación de Asociaciones de Vecinos 5 de abril.
No obstante, el regidor asumía con una sonrisa que se le pida valentía a los grupos políticos porque “valentía es lo que se traduce después de poner sobre la mesa un reglamento alternativo, en consonancia con la nueva legislación andaluza”. Considera que han sido valientes porque ni se han sentado “a vérnoslas venir ni nos hemos puesto de lado. Nos hemos puesto de frente y acometido con la máxima entereza y responsabilidad”.
Afirma que es cierto “lo que dicen de que hay que sentarse a hablar. No queríamos hacer otra cosa más que poner sobre la mesa la necesidad de modificar un reglamento de participación que la Junta te va a decir que se va a tener que modificar dentro de un año o año y medio”.
Al alcalde le gustaría zanjar este asunto: “Me gustaría enterrar esto. Queremos a las asociaciones de vecinos. Nos parecen unos actores imprescindibles en la vida social y económica de la ciudad, pero no son los únicos elementos que forman parte del tejido asociativo de la ciudad. Todos ellos tienen derecho a participar de ese reglamento en igualdad de condiciones”.
Explicó también que las asociaciones de vecinos ya están organizadas, estructuradas, “con sus mecanismos de conducta y tendrían una posición incluso preferente respecto a otras organizaciones que no tienen esa forma orgánica de funcionar”,
El Foro de Participación Ciudadana tendía la mano a “toda la ciudadanía y especialmente a las asociaciones de vecinos, para que sumemos fuerzas y elaboremos conjuntamente entre todos los colectivos un reglamento mejorado y consensuado, que beba de las bases de los textos propuestos, teniendo como referente a la Ley Andaluza de Participación Ciudadana”.
Este ofrecimiento se basaba en el informe emitido por el secretario municipal en relación al Reglamento de Participación Ciudadana, aprobado inicialmente en el Pleno del 30 de diciembre, a propuesta de la Federación de Asociaciones de Vecinos 5 de abril.
Según el colectivo, el informe indica que el reglamento aprobado “privilegia la condición participativa de las asociaciones de vecinos” y el concepto de asociación choca con el concepto inclusivo del proyecto de ley”.
A los grupos políticos le solicitan “coherencia y valentía”, pidiendo que se medie en el entendimiento y evitando el conflicto, puesto que afectaría al derecho de la participación en los asuntos públicos”. Al Gobierno local le piden que promocione el empoderamiento ciudadano.