El juzgado de instrucción número 1 de Cádiz "ha imputado" a los concejales de Ganar Cádiz, Martín Vila y Eva Tubío, por los delitos de “denuncia falsa, calumnias, injurias y, en el caso de Tubío también por falso testimonio en el antes llamado caso Matadero”. Este anuncio lo realizaba el portavoz del grupo popular en el Ayuntamiento de Cádiz, Ignacio Romaní, que salía en defensa de las dos ex concejalas del Gobierno local en la pasada legislatura, Mercedes Colombo (que se encargaba del área de Familia) y Carmen Sánchez, que ocupaba el cargo de edil de Servicios Sociales.
Romaní explicó que además de Vila, las tres hermanas Tubío (Eva, Pilar y Susana) tendrán que declarar en calidad de investigadas entre el 20 de febrero y el 1 de marzo próximo.
“El clan de las Tubío, ha sido imputado por delitos que van desde la denuncia falsa hasta la prevaricación y falsedad en documento, en el caso de Pilar Tubío… Pasando por falso testimonio, calumnias e injurias que les atañe a todas ellas”, declaró Ignacio Romaní.
El portavoz popular pidió la dimisión de ambos concejales, Vila y Tubío, que ocupan cargos en el Gobierno local actual, al ser socios de Podemos.
“Y en todo caso, si ellos no dimiten el alcalde de Cádiz, José María González, que también está procesado, deberá cesarlos de sus cargos”, declaraban desde el grupo popular.
A Martín Vila se “le imputan los delitos de acusación falsa, calumnias e injurias, igual que a Eva Tubío, a la que se le añade falso testimonio”. Mientras tanto, a Pilar Tubío además de todos esos delitos se le añaden prevaricación y falsedad documental, así como a la tercera de las hermanas se le investiga por acusación falsa, calumnias e injurias, según explicó el edil del PP, Juan José Ortiz.
En la rueda de prensa en la que informaron del que denominaron como “caso Tubío”, el PP declaró que dos de las tres hermanas fueron las que presuntamente “urdieron la trama de Matadero para inculpar de manera falsa a nuestras compañeras”, refiriéndose a Carmen Sánchez y Mercedes Colombo.
Cabe recordar que los populares, tras el archivo definitivo del Caso Matadero, al no haber ningún indicio que pudiera demostrar que las concejalas del PP Colombo y Sánchez presionaran a las trabajadoras sociales del Ayuntamiento gaditano para cambiar el criterio objetivo en las adjudicaciones de viviendas públicas en esta zona de la ciudad, anunciaron que actuarían en los tribunales, “sin prisa pero sin pausa”.
Romaní insistió en que el “juzgado ha apreciado indicios claros de delito, por lo que llama en calidad de investigados a Vila y el clan de las Tubío. No vamos a permitir que aquellos o aquellas que intentaron quemar en la plaza pública a dos concejalas de nuestro equipo, que actuaron de manera ejemplar, no sólo cumpliendo con la ley, que eso se da por supuesto, no vayan a pagar por ello”. Para el portavoz del PP, “quien comete un delito, lo paga”.
Añadió en su comparecencia que se va a demostrar cómo “se urdió una trama perfectamente planificada para menoscabar la imagen del Gobierno de Teófila Martínez a través de dos de sus concejales". Y esa trama, añade, se urdió “con la colaboración necesaria de la Junta de Personal, Izquierda Unida, el PSOE y en última instancia el actual alcalde, cuyo partido se personó en la causa”.
Y asimismo, si para Colombo y Sánchez, sin estar imputadas, se pidió reiteradamente su dimisión, “tanto Vila como la señora Tubío deben entregar sus actas de concejales y marcharse a su casa hasta que no se aclare su implicación”.
Repasó el equipo de Gobierno, cuyo “alcalde está procesado y se sentará en el banquillo en el mes de abril; su primer teniente alcalde y su concejala de Vivienda, están investigados, el Tribunal de Cuentas ha mostrado sus dudas sobre la gestión del concejal de Medio Ambiente en el proceso de municipalización, y ya tuvo que dimitir uno de sus concejales hace poco más de un año”.
Para concluir, Romaní recordó que fueron “Carmen y Mercedes las que consiguieron que el Ayuntamiento de Cádiz fuera el que más invirtió en ayudas sociales de toda Andalucía en 2014.