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Campo de Gibraltar

Tres detenidos por explotar a inmigrantes en unas instalaciones de polo

Vivían en barracones junto a las cuadras y caballos que cuidaban. De los detenidos en Algeciras, dos son británicos y responsables del cub ubicado en Secadero

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  • Uno de los inmigrantes llegó con la promesa de ser jugador de polo. Trabaja sin descanso por 500 euros mensuales
  • La propia empresa compraba billetes a los inmigantes, sudamericanos en su mayoría, bajo la promesa de regularizar su situación

La Policía Nacional ha detenido en Algeciras a tres personas acusadas de explotar a extranjeros en situación irregular y de extrema vulnerabilidad, como trabajadores al cuidado de los caballos y las cuadras de unas instalaciones de polo ubicadas en la localidad malagueña de Secadero, entre Sotogrande y Guadiaro, en San Roque.

Se les imputan delitos de trata de seres humanos con fines de explotación laboral, contra los derechos de los trabajadores, favorecimiento de la inmigración ilegal y falsedad documental, explica la Policía en un comunicado.

En el marco de la denominada “Operación Bocha”, la Unidad contra las Redes de Inmigración y Falsedades de la Comisaría de Policía de Algeciras llevó a cabo investigación sobre una empresa dedicada a la actividad deportiva del polo.

Los investigadores tenían conocimiento que sus responsables se podrían estar aprovechando de ciudadanos extranjeros en situación irregular y en situación de extrema vulnerabilidad, a quienes imponían condiciones laborales abusivas, largas jornadas de trabajo, sin apenas descanso diario y semanal, a cambio de un sueldo muy por debajo del establecido como el mínimo profesional.

Todo ello con la falsa promesa de que les ayudarían a regularizar su situación en España y obtener un contrato formal y justamente remunerado.

Según pudieron comprobar, la mayor parte de estas personas vivían en el propio recinto, en zonas próximas a las cuadras de caballos, con la ocupación laboral de petiseros o encargados del cuidado de caballos y cuadras, no pudiendo permitirse residir en otro lugar debido a sus escasos ingresos y a su situación de irregularidad.

Entre las condiciones laborales y de vida que estas personas sufrían se encontraba el miedo a la pérdida de su trabajo ante cualquier accidente laboral, circunstancias que se daba con cierta habitualidad.

Dos de las víctimas identificadas, habrían sufrido distintas lesiones de consideración, pero no recibieron asistencia médica, continuando en su trabajo por miedo a no cobrar su salario o finalizar la abusiva relación laboral.

Así mismo, se pudo determinar que estos trabajadores, en mayor parte procedentes de países sudamericanos, habrían llegado a España mediante oferta de trabajo de la propia empresa, ayudados por sus responsables a acceder a territorio español mediante billetes de ida y vuelta y distintos certificados que amparaban que su situación en territorio Schengen sería la de estancia, y por tanto inferior a tres meses.

Tras expirar ese plazo quedaban alojados en el recinto de la empresa, en situación de estancia irregular, generando un desarraigo, propio de la victimología por explotación laboral.

Otra víctima fue captada en su país de origen por los responsables de la empresa para, mediante la falsa promesa de convertirlo en jugador de polo. Una vez lo trasladaron hasta España le impusieron condiciones labores abusivas, con largas jornadas de trabajo sin descanso y por un sueldo inferior a 500 euros mensuales, explica la Policía.

Tras analizar todos los datos obtenidos, los agentes llevaron a cabo entrada y registro en las instalaciones de la organización investigada, ubicadas en el término municipal de Secadero (Málaga), una pequeña población situada entre Sotogrande y Guadiaro, en el que participó también la Inspección de Trabajo de Málaga.

En el interior pudieron identificar al menos a cinco ciudadanos extranjeros en situación irregular trabajando sin contrato de trabajo ni alta en la Seguridad Social en vigor. Vestían uniformes con el logo de la empresa. Así mismo se pudo comprobar el deplorable estado en que se encontraban los barracones donde moraban las víctimas, los cuales eran colindantes con las cuadras de los animales.

Por parte de la Policía Nacional se tiene constancia de que este tipo de conductas están creciendo, sobre todo en zonas costeras donde la actividad del polo tiene un alto repunte en los meses estivales, aprovechando ciertos empresarios la situación de ilegalidad y vulnerabilidad de ciertas personas para imponer condiciones laborales similares, motivo por el cual existe un plan especial para la detención de sus responsables.

Entre los detenidos se encuentran dos personas de origen británico, el responsable de la empresa y su encargado. También ha sido detenido el contable de la empresa por su participación en los delitos. Han sido puestos a disposición del Juzgado de Instrucción número cinco de Estepona (Málaga).

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