El director espiritual del Consejo de Hermandades y Cofradías de Algeciras, el Padre Rubén, reflexiona con profundidad sobre el verdadero sentido de la Semana Santa. Según explica, esta celebración no debe quedarse en lo externo, en lo procesional o visual, sino que su esencia está en la conmemoración de la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesucristo, “el eje central de la fe cristiana”.
“El culto externo tiene un gran valor catequético y cultural, pero sin liturgia queda cojo”, apunta, haciendo referencia a la necesidad de que los cofrades y fieles no se desliguen de los sacramentos y la vida eclesial. “Hay que entender que la imagen no es Dios, sino un recordatorio, como una fotografía de tus padres: no son ellos, pero los traen al corazón”.
Durante la conversación, el sacerdote señaló la diferencia entre vivir la Semana Santa desde el sentimiento o desde la fe activa. “La fe se ve en las obras. Hay que ser Cristo en pensamiento, palabra y obra”, afirmó, citando a San Pablo. Lamentó, además, que muchos creyentes se alejen de la liturgia, reduciendo su participación a los actos externos: “Celebramos el Jueves Santo, el Viernes de la Cruz, el Sábado de la ausencia… pero muchos no llegan a vivir la Resurrección en la Vigilia Pascual”.
También hizo una llamada a no perder la dimensión trascendente en medio de una sociedad cada vez más secularizada. “Nos hemos quedado con el envoltorio y nos hemos perdido el caramelo”, le apuntaba la periodista. Y el padre Rubén lo confirmaba: “Exacto. La fe no es un accesorio. Es un combate. Es vida”.