Agentes de la Guardia Civil se han incautado de un total de 753 kilos de hachís y 2.000 cajetillas de tabaco de contrabando en dos actuaciones llevadas a cabo este martes en San Roque y por las que han sido detenidas tres personas.
Según ha informado el Instituto Armado en un comunicado, en la primera actuación fueron los agentes encargados del Sistema Integrado de Vigilancia Exterior (SIVE) quienes detectaron una embarcación procedente de mar abierto adentrándose en la playa de Alcaidesa, por lo que fueron alertadas las patrullas terrestres en la zona para proceder a la interceptación.
Cuando éstas llegaron observaron a la embarcación regresando hacia mar abierto y a dos vehículos saliendo de la playa circulando a gran velocidad, iniciándose una persecución en la que logró huir uno de ellos, mientras que el otro vehículo era abandonado por sus ocupantes ante el hostigamiento policial.
Parte de los agentes intervinieron el vehículo, que contenía 24 fardos de hachís en su interior, arrojando un peso de 753 kilos. Mientras, la otra parte del dispositivo realizó un rastreo en la zona, deteniendo a uno de los ocupantes por un supuesto delito contra la salud pública.
Cabe reseñar que el vehículo utilizado para el transporte de la droga había sido sustraído en Málaga en el mes de marzo del pasado año.
Por otro lado, la segunda actuación se originó durante un dispositivo en prevención del contrabando de tabaco, cuando se detectó a otra embarcación navegando adentrándose en el río Guadiaro, por lo que se inició un despliegue para su interceptación.
Así, parte del dispositivo procedió a la intervención del tabaco mientras que el restante continuó el seguimiento de la nave, logrando su interceptación y la detención de los dos tripulantes de la embarcación, que han pasado a disposición de la autoridad judicial como presuntos autores de un delito de desobediencia a agente de la autoridad, al tiempo que se les ha levantado un acta por infracción administrativa de contrabando.
