Se denomina bunkering al repostaje en alta mar: una actividad que consiste en que buques cisterna que actúan como gasolineras se acoplan a los barcos que necesitan repostar y realizan el traspaso de combustible mediante bombas.
Desde marzo de 2012, Unión Progreso y Democracia, a través de su eurodiputado Sosa Wagner, viene denunciando ante el Parlamento Europeo esta práctica de venta “de fuel marino más barato de barco a barco, sin atracar en el puerto, que ahorran inspecciones portuarias y gastos de fondeo” que está produciendo serios efectos contaminantes en la costa de Algeciras, y ha solicitado en reiteradas ocasiones a la Comisión soluciones viables y reales para acabar con el problema.
A pesar de estar dotadas de una específica protección medioambiental, las aguas del Estrecho sufren las consecuencias de reiterados vertidos de fuel y constituyen uno de los focos mundiales más importantes de bunkering incontrolado. De acuerdo a la fiscal del Medio Ambiente de Cádiz, “lo que tenemos aquí es una silenciosa marea negra de vertidos continuos y una situación endémica única“. Diversas organizaciones ecologistas como “Verdemar-Ecologistas en Acción” han calificado la realidad de “auténtica bomba medioambiental“.
En relación a lo anterior, éstas son algunas de las iniciativas puestas en marcha por UPyD en el Parlamento Europeo sobre prevención de desastres medioambientales, seguridad marítima y preservación del medio ambiente:
*15 de marzo de 2012: Francisco Sosa Wagner, eurodiputado de UPyD, muestra al Parlamento Europeo su insatisfacción por la indiferencia de las autoridades europeas ante los efectos nocivos del bunkering incontrolado (ver enlace)
*3 de septiembre de 2012: Sosa pregunta a la Comisión sobre el bunkering (ver enlace)
*16 de octubre de 2012: UPyD se hace eco de que la CE pedirá información a Reino Unido sobre los vertidos tóxicos de Algeciras (ver enlace)
*12 de diciembre de 2012: el eurodiputado Sosa Wagner se congratula de que el Parlamento haya ampliado las competencias para la prevención y control de los desastres medioambientales, especialmente a través del uso del sistema de información CleanSeaNet, un sistema que permite controlar el impacto de los hidrocarburos procedentes de instalaciones en alta mar (ver enlace)
*28 de mayo de 2013: con reservas, Sosa vota a favor de la Directiva sobre la seguridad de las operaciones de prospección y extracción de gas y petróleo en alta mar, aunque lamenta expresamente la poca ambición del texto resultante de las negociaciones entre el Consejo y el Parlamento. Esta normativa, propuesta por la Comisión Europea tras el accidente de la plataforma “Deepwater Horizon” de BP en el Golfo de Méjico en 2010, pretende armonizar criterios y requisitos de seguridad más ambiciosos para prevenir catástrofes similares en aguas de la UE.
Para el eurodiputado de UPyD, “es mejor contar con una norma a nivel europeo, aunque sea de mínimos, que carecer de ésta” pero asegura que “no puede decirse que hayamos realmente mejorado los requisitos para evitar una catástrofe de esta envergadura” ya que las principales propuestas han sido “aguadas en demasía”. En el camino se ha perdido la oportunidad de endurecer la normativa medioambiental reforzando las exigencias de seguridad y de responsabilidad de los operadores así como de mejorar la supervisión independiente y la transparencia.
Sosa Wagner había abogado por unas competencias sólidas de la Agencia Europea de Seguridad Marítima para coordinar las actividades de prevención de riesgos y, llegado el caso, la limpieza de un vertido. “No se trata solo de buscar responsabilidades después de un accidente, sino de prevenirlos ya que éstos tienen consecuencias nefastas y difícilmente indemnizables tanto desde el punto de vista ambiental como el socio-económico”.
*3 de julio de 2013: Sosa Wagner vuelve a preguntar a la Comisión Europea sobre el deterioro y los riesgos de alta contaminación en la bahía de Algeciras. Se trata de una pregunta con solicitud de respuesta escrita, en la que el eurodiputado inquiere “si tiene previsto tomar medidas apropiadas ante las autoridades de Gibraltar y del Reino Unido” por el vertido de residuos generados por el aeropuerto en la costa de Algeciras, así como acciones “inmediatas y eficaces para solucionar este grave atentado ecológico” (ver enlace)
