La Policía Nacional ha procedido a la detención en Algeciras de una pareja dedicada a la explotación sexual de mujeres jóvenes, en situación de necesidad y vulnerabilidad, que se veían obligadas a aceptar limitaciones sobre su libertad sexual. Los detenidos, que regentaban un “piso de citas” en Algeciras, han sido imputados como presuntos autores materiales de los delitos de prostitución coactiva, coacciones, asociación ilícita y contra la salud pública.
La investigación se inició a raíz del estudio de las actividades de un grupo delictivo dirigido por una mujer asentada en Algeciras, que estaría llevando a cabo la explotación sexual de mujeres, tanto españolas como extranjeras, en situación de desamparo y vulnerabilidad social. La investigada captaba a mujeres que se encontraban en situación social y económicamente precarias, ofreciéndoles la posibilidad de solucionar todos sus problemas a través de unas condiciones idílicas de la prestación del servicio.
M.P.P.B., de 38 años de edad, establecía con las mujeres explotadas una cierta relación afectiva al acogerlas bajo su amparo, cobijo y protección en un momento de necesidad, situación que posteriormente era utilizada para aumentar el grado de dependencia psicológica y sumisión hacia los integrantes de la organización delictiva. Con todo ello, incrementaban los beneficios obtenidos por la explotación sexual de las mujeres al aumentar la dependencia, lo que hacía que se convirtieran en una mera fuente de ingresos, debiendo obedecer todas las indicaciones dadas y someterse a las normas y férreo control establecidos.
El pasado mes de febrero se recibieron los testimonios de varias mujeres que daban cuenta de una presunta actividad de explotación sexual coactiva dirigida por esta mujer. Las denunciantes comenzaron a ejercer la prostitución en Algeciras tras ponerse en contacto con la denunciada mediante un anuncio que vieron en una página web en Internet donde ofrecían la posibilidad de trabajar como “scorts” obteniendo a cambio grandes beneficios económicos.
Los investigadores de la UCRIF de Algeciras realizaron varias gestiones para comprobar la veracidad de los hechos narrados por los testimonios de las víctimas. Igualmente, se comprobó la existencia de los anuncios relativos a la oferta sexual, localizando una serie de anuncios que correspondían con los colgados por la investigada.
Registros
Los agentes, para obtener las pruebas para esclarecer los hechos y obtener pruebas que incriminaran a los investigados como beneficiarios últimos de las ganancias obtenidas, solicitaron al Juzgado de Instrucción numero uno de Algeciras los mandamientos de entrada y registro en los inmuebles de los investigados.
En los registros simultáneos efectuados el pasado 21 de abril se incautaron numerosas evidencias materiales, interviniendo efectos o instrumentos del delito, libros, papeles u otros objetos que corroboraban la actividad delictiva de explotación sexual. Igualmente se descubrió en los domicilios la tenencia preordenada al tráfico de cocaína y hachis por parte de los encartados. Muchos clientes solían solicitar droga a los responsables de estas casas de citas, siendo suministrada por las propias chicas. El dinero intervenido en los registros practicados asciende en su totalidad a la cantidad de 4.460 euros.
Fruto de las gestiones y pesquisas realizadas se recopilaron pruebas que incriminaron tanto a la investigada M. P. P. B., como a su pareja F.J.T.T. con un reparto de tareas conformándose como un clan organizado dedicado al control de la explotación sexual de mujeres jóvenes.
Servicios sexuales controlados con cámaras
Según el estudio del contenido de las gestiones, pesquisas, las vigilancias efectuadas en los domicilios objeto de investigación y los registros concluidos en los dos domicilios se determinó el modus operandi empleado por los investigados.
La detenida mantenía un férreo control entre las mujeres, que no tenían libre acceso al piso y tenían que avisar de cuándo empezaban y cuándo acababan de prestar servicios sexuales, y dominar en todo momento su libertad de movimientos. Todo ello creaba una dependencia psicológica hacia ella, siendo ésta la encarga de suministrarles los medios para el desarrollo de la prostitución. Dicho control se ejercía estando presente en el momento de la llegada de los clientes e, incluso, haciendo un seguimiento de los servicios prestados a través de un sistema de cámaras para ver si se desarrollaban con las condiciones exigidas.
El detenido, pareja de la cabecilla, se encargaba de la recogida de los beneficios y de su custodia en el domicilio familiar . Con el dinero de los beneficios realizaba distintos ingresos y pagos. Entre los ingresos se encontraban los correspondientes a las rentas mensuales del arrendamiento del piso de citas. Igualmente realizaba actividades accesorias o asistenciales necesarias para mantener el control permanente que su pareja realizaba sobre las mujeres explotadas. Otra de sus funciones era la de transportar a las mujeres explotadas en los servicios sexuales que prestaban en inmuebles ajenos al piso de citas, realizando tanto el traslado como la recogida
Nuevos pisos por la provincia
Los detenidos tenían ingresos suficientes y tenían pensado expandir el “negocio” con la ubicación de más pisos de citas en esta ciudad e, incluso, con expandirla a otras provincias, a pesar de los problemas ocasionados puntualmente con los vecinos de las casas de citas y haberse trasladado hasta en tres ocasiones.
El lucro obtenido y buscado con la actividad era de tal medida que los miembros del clan utilizaban intermediarios “para la realización de pagos y actividades de negocios, con objeto de que no se detectaran sus ingresos. Todo ello contrastaba con su situación económica declarada, teniendo en trámite varias ayudas económicas al haber alegado falta de ingresos de la unidad familiar, o en base a la situación de su pareja
La investigación ha sido iniciada y desarrollada por agentes de la Policía Nacional adscritos al Grupo II de la U.C.R.I.F. pertenecientes Brigada de Extranjería y Fronteras de la Comisaría Algeciras.
La Unidad Contra las Redes de Inmigración y Falsificación tiene como función la investigación de aquellas organizaciones criminales cuya actividad delictiva se centra en la explotación sexual de mujeres, que por diversas circunstancias se encuentran en situación de vulnerabilidad ante situaciones de necesidad, que en algún caso suponen riesgo de exclusión social, de manera que se ven avocadas a soportar la situación de explotación a pesar de las duras condiciones en las que se desarrolla la actividad, bajo una situación de sometimiento a un pleno y férreo control sobre su persona, con graves privaciones de libertad en un clima coactivo constante una vez que son captadas bajo la promesa de obtención de grandes beneficios en poco tiempo, generando en las víctimas un estado psicológico que hace que en muchos casos no sean plenamente conscientes de la situación de explotación a que se ven sometidas.
Contra la trata
Esta operación se enmarca dentro "Plan Policial contra la trata de seres humanos con fines de explotación sexual", que incluye una campaña con dos vídeos que informan de las distintas vías habilitadas para canalizar tanto la colaboración ciudadana, como la denuncia de las víctimas. Estas vías ofertadas son el teléfono gratuito -900.10.50.90- atendido las 24 horas por policías especializados de la Brigada Central contra la Trata de Seres Humanos, y el correo electrónico trata@policia.es. Ambos medios preservan la confidencialidad de sus usuarios. Además, este plan creó también un espacio propio dentro de la página web oficial de la Policía Nacional: www.policia.es/trata que sirve de canal adicional de información sobre este delito.