El Ministerio de Exteriores ha recabado hoy explicaciones de la Embajada de Marruecos en Madrid tras la expulsión de ese país de cinco españoles -un magistrado y cuatro abogados- por solidarizarse con presos saharauis y ha transmitido la preocupación de España por las garantías de los afectados.
El Gobierno de Marruecos expulsó hoy del país a cinco españoles, dos franceses y un belga que habían llegado a Rabat para solidarizarse con los presos saharauis del llamado "grupo de Gdaim Izik", en huelga de hambre desde el pasado 1 de marzo.
Un comunicado de la Wilaya (gobierno civil) de Rabat acusó a los abogados de "entrar en Marruecos para sembrar la discordia y atentar contra el orden público".
La Asociación Profesional de Abogados Saharauis en España señala en un comunicado que los españoles expulsados son el magistrado asturiano Jesús María Martín Morillo, los abogados andaluces Francisco Serrano y Juan Carlos Gómez Justo, la aragonesa Altamira Guelbenzu y la canaria María Nieves Cubas Armas, junto al abogado belga Eric David, la abogada francesa Ingrid Metton y la asistente gala Joelle Toutain.
Fuentes diplomáticas españolas han informado hoy de que la Embajada en Rabat ha estado pendiente desde el primer momento que tuvo noticias de este asunto y que hizo varias gestiones, pidiendo explicaciones oficiales de lo ocurrido.
El cónsul general de Rabat estuvo igualmente activo desde el primer momento, realizando gestiones consulares y pudo finalmente prestar a los españoles asistencia consular.
Según informan las mismas fuentes, el cónsul se reunió con los españoles afectados por la decisión administrativa de expulsión de las autoridades marroquíes y se pusieron a su disposición para apoyarles en todo lo posible.
El Ministerio que dirige José Manuel García-Margallo ha recabado hoy oficialmente explicaciones de la Embajada de Marruecos en Madrid y ha transmitido la preocupación por las garantías de los afectados.
Según el comunicado de la Asociación Profesional de Abogados Saharauis en España, los españoles formaban parte de una misión que tenía como objetivo visitar a 13 presos políticos saharauis que llevan 37 días en huelga de hambre.
Una vez en el hotel, fueron alcanzados por la policía y llevados a la fuerza a dependencias policiales donde fueron sometidos a un intenso interrogatorio y expulsados, según esa asociación.
Los ocho abogados europeos -entre ellos los cinco españoles- fueron detenidos ayer por la tarde en su hotel de Rabat y la policía decretó su expulsión administrativa "de acuerdo con la ley 02-03 relativa a la estancia de extranjeros", sin dar otros detalles.
La intervención del Consulado español en Rabat retrasó la expulsión hasta hoy, dijeron a Efe fuentes de la Asociación Saharaui de Víctimas de violaciones de los derechos humanos.
Los cinco españoles viajan hoy en un ferry desde Tánger hasta la ciudad gaditana de Algeciras, donde tienen previsto llegar a las 14:00 horas para ofrecer a continuación una rueda de prensa.
Los trece presos del Grupo de Gdaim Izik, el campamento de las afueras de El Aaiun que en 2011 fue escenario de violentos disturbios, se habían declarado en huelga de hambre para exigir un nuevo juicio por considerar que el anterior, celebrado en 2013 en un Tribunal Militar y que los condenó a penas de entre 25 años y la perpetuidad, había carecido de todas las garantías jurídicas.