El tiempo en: Jaén

Chiclana

La exposición ‘García Gutiérrez y la música’ continúa abierta al público

Esta muestra estará a disposición de los visitantes hasta el próximo 4 de octubre en las espacio ‘De Paso’ de estas instalaciones municipales.

Publicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad Ai
  • Inauguración de la exposición.

La exposición ‘García Gutiérrez y la música’ continúa abierta al público en el Museo de Chiclana y lo hará hasta el próximo 4 de octubre, en el espacio ‘De Paso’, siendo la muestras que en esta ocasión sirve para conmemorar el nacimiento del autor chiclanero. Así pues, considerado este 2020 como año Beethoven en el mundo de la Cultura, no está mal detenerse en la vinculación entre el poeta romántico y la música.

No era fácil para un poeta joven, desconocido y recién llegado a la capital del reino, salir económicamente adelante, subsistir con cierta dignidad al menos. Por ello, no es de extrañar que con frecuencia los autores recurriesen a fuentes extras de ingresos. Tal fue el caso de García Gutiérrez.

Escribió para periódicos y revistas; con el francés, que a fuerza de voluntad aprendió, tradujo obras de autores relevantes de su época como Scribe (‘El Vampiro’) o Dumas (‘Calígula’), entre otros, o recurrió a la música, resultando, de su colaboración con músicos como Emilio Arrieta zarzuelas populares en las que alcanzó también reconocimiento: ‘Los alcaldes de Valladolid’, ‘La vuelta del Corsario’, ‘La mujer valerosa’, ‘El grumete’, ‘La espada de Bernardo’, ‘Azon Visconti’, ‘El robo de las sabinas’, ‘Dos coronas’, ‘El duende en palacio’, ‘Galán de noche’, ‘Cegar para ver’, ‘El capitán negrero’, ‘La taberna de Londres’, ‘Jonás Segundo’, ‘Un día de Reinado’ y, una de las más renombradas, ‘La Cacería real’.

En esta última, un labrador da lecciones de patriotismo a un Felipe V, recién llegado al trono y a España. La crítica obvia que los versos destilan anticipaba, de algún modo, la que habría de ser una de sus piezas más populares, aquella que, con música de Arrieta y con el trasfondo de la Revolución de 1868, se convirtió prácticamente en himno de su tiempo: ‘¡Abajo los Borbones!’.

Mucho más, pues, que la más que sabida relación de García Gutiérrez con la música a través de las adaptaciones operísticas de Verdi de ‘El Trovador’ o de ‘Simón Bocanegra’.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN