En democracia escuchar al pueblo es un ejercicio tan normal y cotidiano, que forma parte de la esencia y la practica de la actuación política. Resulta preocupante, cuando se convierte en un episodio o un hecho excepcional o se utiliza como pantalla para que el mandamás de turno haga lo que le venga en gana.
Hace diez días, el domingo de la Cabalgata de la antelación y hacia ninguna parte, titulaba mi artículo en EL FARO INFORMACION, con generosidad y benevolencia, como la del DESCONCIERTO, y decía que estaban totalmente equivocados aquellos que quisieran sacar alguna rentabilidad política a nuestra Fiesta Mayor, pero que como un algecireño más teníamos que esperar a que finalizará para ver si los cambios que ustedes habían hecho por la vía del “ordeno y mando” habían sido positivos y beneficiosos para nuestra ciudad.
La realidad es tozuda y el pueblo de Algeciras ha sabido siempre lo que ha querido, y usted querido amigo Landaluce ha tenido que reconocer que se había equivocado, como nos ocurre a todos los que tomamos decisiones. Los caseteros, los feriantes, la oposición política y la calle en general le han dicho que NO, que así NO, además se lo le habían advertido con tiempo.
Ahora, me alegro que esté dispuesto a rectificar, y nos dice de recuperar el Domingo Especial y que la Feria sea de Sábado de Sábado, una vez más actúa como si solo existiera usted, no se precipite, cambie el talento de la improvisación de lo que se le ocurra en cada momento por la participación, y el talante de la imposición por el diálogo.
Una vez transcurrida la Feria de la presaca porque está no ha tenido resaca, la coronación clandestina, la cabalgata aislada, la más corta y la más cara y todo lo que ha podido enfadar al personal, haga un diagnóstico realista, no de los que siempre le dan la razón por miedo o peloteo, y precise todo lo que ha funcionado y lo que no, y sobre todo analice con calma, sosiego y rigor por qué.
Después, cambie de estilo y escuche a todo el que tenga cosas que decirles desde sus vivencias y conocimientos en estos menesteres feriales. No le quepa la menor duda que aprenderá. Abra una amplia mesa con los caseteros, los representantes de los feriantes, los partidos políticos, los colectivos de estudiantes, los servicios municipales que intervienen de forma más intensiva, la empresa y las asociaciones taurinas, y todos aquellos que puedan aportar algo en la mejora de la misma.
Incluso, invite a todos los algecireños y algecireñas, a que por escrito, llamando gratuitamente a un buzón de voz o a través de las redes sociales les envíen todas las ideas que se les ocurran en beneficio de nuestra Feria. Por favor, una curita de humildad, no diga y repita que es el que más trabaja, ya que si no obtiene resultados, se estará usted llamando torpe.
No se olvide, que la FERIA DE ALGECIRAS, es una de las más importantes de Andalucía y España, no puede ser un caprichoso juguete en manos de nadie. No es una oportunidad para hacerse todas las fotos del mundo a todas horas del día, porque el protagonismo de nuestra gran fiesta es del PUEBLO, y supera cualquier intento de catetismo político que más que admiración genera cabreo y abucheos.
Ah, y no se me enfade cuando reciba criticas por su actuación, como usted ha dicho “todo el mundo se equivoca” y ha expresado ” hacer una feria como los algecireños quieran”. Pues adelante hombre de Dios, pregunte, tome nota y después decida. Una propuesta, la Feria del 2014, dedíquesela a la Paciencia del Pueblo Soberano. Le aseguro que todos y todas se lo agradeceremos.