Osasuna logró ante el Espanyol su tercera victoria en El Sadar, gracias a un gol del media punta cordobés Álvaro Cejudo, que le permite eludir los puestos de descenso y acercarse a la zona media de la clasificación de la Liga BBVA.
El Espanyol dominó durante el segundo tiempo, pero fue incapaz de crear ocasiones de gol. El partido no tuvo calidad con dos equipos más preocupados por defender. Los rojillos fueron más intensos y aprovecharon uno de los pocos errores del rival para marcar en el minuto 32 del partido y sumar tres puntos vitales en su lucha por salvar la categoría.
Armenteros fue el primero que se acercó a la portería visitante con peligro. El argentino envió una falta directa muy cerca de la escuadra de Kiko Casilla, a los dos minutos del encuentro.
A continuación, una indecisión entre los defensas Loties y Marc Bertrán dejó la pelota a los pies de Sergio García, que lanzó alto un balón en clarísima situación de gol.
Los dos zarpazos iniciales dieron paso a un partido con dominio catalán y contrataques locales, al revés de lo previsto. Una arrancada de Cejudo terminó con un disparo lejano sin peligro al cuarto de hora y Andrés Fernández intervino con acierto en un disparo con rosca de David López desde fuera del área, ocasiones esporádicas en un choque abierto e igualado.
El primer error del Espanyol en defensa lo pagó muy caro. Una cesión muy corta de Javi López a su portero fue aprovechada por Cejudo para regatear al defensa, batir a Casilla por bajo y adelantar a los navarros en el marcador a los 32 minutos.
Por momentos el conjunto de Aguirre pareció desaparecer del campo, pero tuvo un arreón final en jugadas a balón parado, mientras De las Cuevas y Joan Oriol pusieron a prueba a Casilla en dos contraataques locales sin gran peligro.
En la reanudación, un tiro del españolista Córdoba en semifallo y otro de Cejudo dieron paso a un dominio territorial visitante poco efectivo, que no puso en excesivos apuros a la defensa osasunista.
Javier Aguirre se vio obligado a mover su banquillo. Quitó a un Simao que pasó desapercibido y entró Pizzi.
Sin ocasiones claras de gol, Javi Gracia optó por sustituir a de las Cuevas y colocar a un hombre de refresco como el canterano Torres en la media punta. El equipo catalán metió a Osasuna en su área con un buen tiro de Abraham, que desvió el meta Andrés, y forzando varios saques de esquina sin consecuencias.
El Espanyol apretó en el último cuarto de hora ante un Osasuna bien organizado en defensa. El chileno Silva reforzó el centro del campo navarro para presionar y no dejar jugar al contrario. Los locales se echaron muy atrás y ello provocó momentos de agobio visitante.
Un remate de Capdevilla llevó la emoción al resultado en los minutos finales, donde Osasuna tampoco fue capaz de sentenciar el encuentro con un segundo gol. En el tiempo añadido, el Espanyol pidió penalti en una mano muy clara de Oier Sanjurjo dentro del área que el árbitro no señaló.
