El secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha advertido al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, de que España "cada día se le está yendo más de las manos" y ha acusado al Ejecutivo de "abonar" la desafección y el "divorcio" entre la política y los ciudadanos con su actitud.
En declaraciones en el Congreso, Rubalcaba ha destacado como evidentes tres "fracturas" en España, una social --la que más le preocupa, ha dicho--, una territorial y una tercera política e institucional, que se manifiesta en que "hay mucha gente que rechaza la política".
El jefe de la oposición ha reconocido que sería "injusto" culpar sólo a Rajoy de la fractura territorial, que ha atribuido a la "falta de responsabilidad" tanto del Gobierno central como de la Generalitat mientras "votaban las mismas políticas". Y tampoco ha querido imputar sólo al Gobierno la corriente de rechazo a los políticos.
"Sería injusto, pero cuando uno toma decisiones como desaparecer de la Cámara o sacar de ella debates tan importantes como el rescate financiero está abonando este tipo de divorcio", ha argumentado. Que el rescate financiero español se debata en el Parlamento alemán y no en el español, ha remarcado, es "insufrible para la dignidad de la Cámara y seguramente para muchos españoles".
Rubalcaba no ha podido plantear su pregunta semanal en el Pleno de control al Ejecutivo, puesto que Rajoy se encuentra en la Asamblea General de la ONU, así que se la ha hecho ante los periodistas, preguntándose "qué debe pasar para que se dé cuenta que debe cambiar el fondo de sus políticas, sobre todo las sociales, y también la forma de hacer política".
ACUERDOS PARA LOS GRANDES PROBLEMAS
El líder de la oposición ha acusado al Ejecutivo de "huir" del Congreso y de utilizar su mayoría absoluta para rechazar todos los debates y le ha pedido que practique el diálogo que tanto reclama y que busque acuerdos con los grupos que los quieren, como el PSOE. "Creemos que el acuerdo sensato, razonable, para hacer frente a los grandes problemas del país también ayudaría a corregir esa desafección que existe en los ciudadanos", ha remachado.
De hecho, preguntado por la manifestación de este martes en torno al Congreso de los Diputados, ha enfatizado que sería "un error" que los políticos vean sólo los aspectos de orden público, sino que deben actuar para combatir el rechazo a la política que "tiene que ver con la crisis" y con la sensación de que la política no puede hacerle frente, pero también "con las actitudes de los políticos y los gobiernos".
CAUTO SOBRE LA RESPUESTA POLICIAL
Sobre la respuesta policial a la manifestación, Rubalcaba ha sido más cauto que otros diputados de su grupo, y se ha contentado con decir que, aunque es consciente de lo difícil que es el trabajo policial en estos casos, el ministro de Interior debe pedirle a la Policía que "busque fórmulas" para evitar "determinado tipo de cosas".
El líder del PSOE ha recordado que él mismo fue ministro de Interior y que tuvo "algún problema de la misma naturaleza de los que hubo anoche", así que ha querido ser tan prudente como le habría gustado que otros exministros lo hubiesen sido con él.
Rubalcaba se ha declarado consciente de lo "difícil" que es el trabajo policial de compaginar "el derecho a manifestarse y el derecho de la gente a tener orden público" y distinguir al manifestante del que puede provocar situaciones difíciles pero cree que el ministro "tiene que pedirle a la Policía que evite determinado tipo de cosas".