El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha defendido este sábado que su partido es el de la "ejemplaridad" y, tras pedir a todos sus compañeros que contribuyan a "construir un socialismo irreprochable", ha lanzado un mensaje a los militantes implicados en el caso de las 'tarjetas b' de Caja Madrid: "A todos los que han utilizado la tarjeta negra en Caja Madrid, tarjeta roja directa, no caben en el PSOE", ha asegurado.
Así lo ha señalado el líder de los socialistas durante su intervención en el Foro Ciudadano sobre 'Limpieza y Calidad Democrática', en el que los socialistas han aprobado su nuevo código ético, con el que quieren seguir trabajando para ser el partido "más honesto" y "más transparente".
Sánchez se ha referido al escándalo de las tarjetas de Caja Madrid, investigado en la actualidad en la Audiencia Nacional, y, tras comenzar apuntando que algunas conductas pueden "no ser ilegales" pero sí "inmorales a todas luces", ha dejado entender que expulsará del PSOE a todos los altos cargos socialistas que usaron la tarjeta de la entidad bancaria. La dirección abrió un proceso interno para investigar el uso que dieron los 16 militantes socialistas implicados en la causa, que por el momento sigue abierto.
Sánchez ha recalcado que el PSOE ya está convirtiendo en "hechos" sus "compromisos" y ha recordado que esta semana el partido ha hecho públicas todas sus cuentas y las declaraciones de bienes y patrimonio de sus dirigentes. "Dijimos que íbamos a ser el partido más transparente de España y hoy nuestras cuentas pueden ser investigadas y visitadas en cualquier página web. Las cuentas del PP están siendo investigadas en la Audiencia Nacional", ha recalcado.
"ASCO" ANTE QUIENES OCULTAN SU DINERO "EN CUENTAS B"
Sánchez ha afirmado que siente "asco" ante quienes han ocultado su dinero "en cuentas b" mientras su generación "endeudaba su vida por la burbuja inmobiliaria" y ante quienes "llevaban su dinero a paraísos fiscales mientras miles de familia se quedaban sin techo, brutalmente desahuciadas". "Estoy harto de los que se cuentan como patriotas mientras abren cuentas en Suiza", ha remachado.
Sánchez ha criticado el "patriotismo de sobresueldos y amnistías fiscales" y ha metido en el saco al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y al expresidente José María Aznar, al exministro Rodrigo Rato y al expresidente de Caja Madrid Miguel Blesa, junto al extesorero del PP Luis Bárcenas. A su juicio, antes de la crisis económica, España ya adolecía de una "crisis de valores" que "ha ido debilitando la confianza" de los ciudadanos en las instituciones, porque hizo prevalecer la cultura del "pelotazo" frente a la del "esfuerzo".
Ahora, ha defendido, los españoles quieren una política en la que "valga la pena creer" y que pasa por políticos "honestos" que se alejen de "una derecha que llegó mintiendo y aspira a continuar mintiendo". En su opinión, lo que quieren los ciudadanos es que el PSOE sea "el partido de la ejemplaridad" y, para ello, ha convocado a todos los socialistas a que trabajen por un partido "sin tacha" y "a la altura de los ciudadanos".
Sánchez ha asegurado compartir "el enfado y la rabia" de los ciudadanos ante los casos de corrupción y ha añadido que siente especial "rabia por el daño" que puede hacer "un sólo sinvergüenza" a la democracia. Y como es consciente de que "la corrupción es real", se ha comprometido a que "quien la hace, la pague y lo pague devolviendo el dinero que ha robado". "Me niego a aceptar que es inevitable", ha remachado.
Y para luchar contra estas situaciones, ha presentado el nuevo código ético del partido, un conjunto de normas que son el compromiso del PSOE, de "todos y cada uno" de sus miembros, "con todos los españoles, con la transparencia, con la honestidad y con la apertura" y por el "buen gobierno de España".
Sánchez ha asegurado que es "consciente" de que la gente puede pensar que estas palabras se han dicho muchas veces y "tantas veces han quedado en nada" pero ha insistido en que seguirá pasando de las palabras a los hechos como está haciendo cuando "no hace 100 días" que llegó a la Secretaría General del partido.
Entre los nuevos compromisos, Sánchez ha destacado el de dedicación exclusiva de sus parlamentarios y ha garantizado que los diputados y senadores van a trabajar "a tiempo completo" para los ciudadanos, porque creen que "no basta con los ratos libres".
Se trata, ha dicho, de hacer "una nueva política" al servicio de los ciudadanos y no de los propios intereses. Y por esto precisamente, ha recalcado, los socialistas españoles han votado en contra del exministro Miguel Arias Cañete en la Comisión Europea. Además, ha denunciado que lo que el PP entiende por "regeneración" es "poner al frente de RTVE al presidente de Telemadrid".