La directora general de Calidad Ambiental, Sostenibilidad y Cambio Climático, María Sagrario Pérez Castellanos, ha admitido que "no salió ninguna cantidad" de compost de la planta de biorresiduos de Sogama en Cerceda (A Coruña) desde su puesta en marcha.
En respuesta a una pregunta del BNG en el Parlamento gallego, la directora general ha explicado que solo tres municipios --Cerceda, A Laracha y Carballo-- envían sus biorresiduos a esta planta, por lo que "es poco lo que está entrando", y "dado el proceso que tiene el compostaje" aún "no salió ninguna cantidad de la planta de Cerceda".
Con todo, Pérez Castellanos espera que en próximos meses haya "un compost de calidad" que se pueda usar para fertilización de suelos en jardines y terrenos agrarios, aunque reconoce que hay "mucho margen de mejora" en el funcionamiento de la planta de compostaje.
Además, remarca que la Xunta promociona "con todas las ayudas posibles" que haya más ayuntamientos que sumen, pues la UE ha marcado enero de 2024 como fecha tope para que se implante la recogida selectiva de residuos orgánicos, además de que el Ministerio para la Transición Ecológica quiere adelantar esa fecha para municipios de 50.000 habitantes.
Mientras, la Xunta proyecta otras tres plantas de compostaje, una en cada provincia, en los municipios de: Vilanova de Arousa (Pontevedra), Cervo (Lugo) y Verín (Ourense).
EL BNG ALERTA DE "COLAPSO" EN SOGAMA
Por su parte, el diputado Luís Bará (BNG) ha alertado del "colapso" que sufre el complejo de Sogama por antigüedad de sus instalaciones y mal funcionamiento, ya que "quiere comer más de lo que puede tragar", por lo que solo se dedica a "incineración y vertido".
Tras quejarse de que los populares vetan la comparecencia del presidente de Sogama en el Parlamento, Bará ha denunciado que esta sociedad pública cuenta un "entramado de empresas con muchísimas irregularidades".
Así, advierte que "cuatro grandes contratos" --de la planta de incineración, ampliación de Sogama, vertido de Areosa y planta de compostaje-- "están todos en las manos del grupo Valtalia", "que tiene una especie de monopolio de toda la gestión de Cerceda" que suman unos "500 millones". A esto se suma que Copasa se encargue de diferentes cometidos como el transporte, de modo que se pregunta si la gestión del complejo funciona como un "cartel organizado".
Además, advierte de que hay una "avería" en la incineración que está afectando al funcionamiento del complejo. También denuncia que "se están falsificando los pesajes" de los camiones, que "van con sobrepeso" y provoca un "gravísimo riesgo" por el que ya "hubo varios accidentes".
Respecto al "bluff" de la planta de compostaje, censura que los datos son "raquíticos y ridículos". "Hace más de dos años que fue la consejería a inaugurar y aún no dieron ni sacado un kilo de compost", ha espetado.
Igualmente, Luís Bará reprocha que Galicia está a "la cola" del Estado al reciclar solo el 15% de la basura, mientras reprocha a la Xunta incumplir el compromiso de vertido cero en 2020. Un "desastre de funcionamiento", define sobre el modelo Sogama.
Enfrente, la directora general de Calidad Ambiental ha defendido que Sogama tiene capacidad para "tratar el 100% de residuos", al tiempo que ha señalado que se ha reducido en "un 90%" el vertido.
Además, ha recomendado a Bará que puede emplear los "mecanismos" de denuncia pertinentes para sus afirmaciones.
Eso sí, María Sagrario Pérez Castellanos ha afirmado que "es verdad" que hay "dos puntos de mejora" en el complejo de Sogama. Por un lado, los nitratos en las pluviales, para lo cual se van a hacer obras este verano debido a los problemas que provocan las heces de gaviotas en estas instalaciones. Por otra parte, las aguas subterráneas, para lo cual se realiza una "investigación exhaustiva", pues Areosa está en al parte baja de un área geográfica con otros vertidos, "alguno de ellos intervenidos por la Consejería".
La directora general ha dicho "no poder sacar pecho" por los datos de reciclaje que hay en Galicia, por debajo de la media española.