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Alcalá la Real

Un inmenso Tadej Pogacar impone su ley en la Fortaleza de la Mota

Solo el mallorquín Enric Mas ha podido disputar la victoria al maillot amarillo, pero el esloveno demostró su superioridad en los últimos metros

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  • Tadej Pogacar, en la llegada a la línea de meta. -

Con su estilizada figura en la que se dan todas las condiciones del ciclista total, el gran Tadej Pogacar no ha dejado margen para las especulaciones y se ha impuesto de una manera elegante, mesurada y a la vez contundente en el muro de piedra de la Fortaleza de la Mota.

Ya en la llegada al casco urbano, por la Avenida de Europa, el grupo de escapados integrado por Mikel Landa, Matej Mohoric, Santiago Buitrago, Carlos Rodríguez, Lorenzo Rota, Georg Zimmerman y Dylan Teuns discutían su jerarquía. Sin embargo, ya en la rampa alta de la calle Real y en el propio ascenso a la Fortaleza de la Mota, eran otros dos convidados a esta fiesta –Enric Mas y Tadej Pogacar– los que acabarían poniendo sus cartas sobre la mesa.

Parecía que el mallorquín se ponía a rueda del maillot amarillo para reservarse. ¿Era posible imaginar que el corredor del Movistar Team pudiera reservar suficientes fuerzas para disputarle la etapa al esloveno? Las piedras lisas de las últimas curvas de ascenso al recinto fortificado revelarían, no obstante, que no sería así. El ciclista del Emirates se destacaba unos metros del balear, casi como si lo hiciera sin esfuerzo, poniendo la suficiente tierra de por medio como para lograr una victoria incontestable sobre la línea de meta erigida en la planicie de la ciudadela.


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