La resaca de la Copa del Rey deja en Jaén la lectura de que pasó lo de siempre cuando el equipo blanco ya acariciaba el pase a la segunda eliminatoria del torneo del KO. El pupas o aquella frase de Alfredo Di Stéfano cuando era entrenador en la que decía “jugamos como nunca pero perdimos como siempre” han volado por el cielo encapotado de la capital jiennense mientras la movía el viento que azotaba a la ciudad. No pudo ser un año más pero ahora llega también la realidad, que no es otra que la visita del Málaga City a La Victoria el próximo domingo a las 16.30 horas.
Los blancos hicieron un esfuerzo descomunal que se dejó sentir conforme avanzaban los minutos y que quizás les pudo en el último cuarto de hora de partido para mantener la ventaja. Un síntoma que también se une a la desesperación que mostraban los jugadores ante esas faltitas que pitaba el colegiado, cuya actuación no fue valorada por el entrenador del Eldense, mientas que Emilio Fajardo se limitó a decir: “Soy un entrenador de Tercera y si doy mi opinión igual me caen 12 partidos de suspensión”. Así lo comentó en primera instancia pero ante otra pregunta en la sala de prensa sobre la actuación del equipo respondió: “Somos un equipo con una historia, con 101 años y es evidente que deben respetarnos. Con eso contesto otra pregunta anterior”. Claro, conciso y directo.
La resaca copera también ha agotado las reservas energéticas de un Real Jaén que ya el pasado domingo jugó en casa y cayó derrotado ante el Atlético Malagueño ante el que tuvo que poner mucho físico para tratar de remontar un partido que no pudo. Con el de ayer ante el Eldense suma tres derrotas consecutivas en casa, pero está de la Copa deja otro sabor respecto a las dos anteriores en la Liga. Y es que el torneo del KO ha desgastado, pero también ha elevado la moral por la capacidad que tiene el equipo jiennense, donde Brian Triviño marcó tras un buen partido con su pelea en la zona del bloque alto. “Marcar siempre es importante para un delantero y espero que esto sea un punto de inflexión para nosotros, pero nos hemos quedado fastidiados por el resultado final. Ahora hay que regresar a la Liga, recuperar todo lo posible el físico y mirar ya al partido del próximo domingo contra el Málaga City”, señalaba el delantero valenciano, cuyas palabras también eran el sentir de Javi Moyano, que cumplía 200 partidos de blanco: “Ha sido una lástima porque lo hemos tenido en la mano pasar de ronda. Quizás los árbitros y eso lo he vivido cuando jugaba en el Valladolid miran más por el equipo de mayor categoría, pero nosotros creo que hemos hecho un partido muy completo, que demuestra que podemos competir al máximo nivel y ante rivales de una entidad mayor que la nuestra”.
Falta mirar los depósitos de combustible que tiene cada jugador de la plantilla de Emilio Fajardo para recibir al Málaga City. El desgaste ha sido más que evidente, pero también hay que recuperar el aliento para volver a la Liga y sacar adelante un partido ante un rival que si el año pasado se salvó en la repesca, esta temporada se está mostrando más correoso y competitivo que en el curso anterior. La expulsión, por cierto, de Pablo de Castro deberá quedar sólo para la Copa, ya que no fue una roja directa. Esto quiere decir que su sanción será para el próximo partido que el algecireño dispute en esta competición a la que el Real Jaén puede acceder de nuevo si el campeón de Liga o uno de los siete mejores segundos, como el año pasado, de los 18 grupos de la Tercera Federación de esta temporada.
Acta del encuentro
La derrota contra el Eldense también dejó señalado al colegiado del encuentro, Rafael Sánchez López, señalado por el público y recriminado incluso en el terreno de juego. El acta del partido recoge en su apartado de público que un aficionado con indumentaria del Real Jaén se dirigió al asistente espetándole “Línea eres un mierda”. Fue identificado por la Policía Nacional, como también ocurrió con el Director General del Real Jaén, José Antonio Presa ‘Puskas’, que según recoge el acta se encaró con el cuarteto arbitral en el campo para decirles “Vaya telita, os habéis lucido. ¿Quiénes os creéis que sois?”.
