El sprint final de la primera vuelta llega para un Jaén Paraíso Interior que tiene la sartén por el mango para clasificarse para la próxima Copa de España. Dani Rodríguez quiere ir paso a paso y partido a partido, sin pensar más allá de lo que pueda suceder en el futuro. Pero la verdad es que es complicado no mirar de reojo a este final de la primera parte de la Liga regular con el ansia de meterse en la competición fetiche de los amarillos.

La visita el domingo a las 20.00 horas de Palma será el primero de los tres envites del tramo final de la primera vuelta. Es el vigente Campeón de Europa y la rivalidad con los jiennenses está fuera de toda duda. Pero los mallorquines no andan muy finos esta temporada tras un inicio intratable. Su última derrota en casa ante ElPozo les ha descolgado de los tres primeros puestos de la tabla y en el Olivo Arena no pueden despistarse si no quieren verse abocados a supeditar su clasificación para la Copa en los dos últimos partidos de la primera vuelta.

El hecho de que los amarillos estén a cinco puntos de Palma hace pensar que sea complicado cazarles, pero la necesidad de mantener la posición y depender de sí mismos hará que el domingo se pueda vivir una gran noche tras el concierto de Raphael. Un partido de altura y de los que cuelgan el cartel de no hay billetes porque Jaén Paraíso Interior tiene que correr ahora a favor, para que no lo agarren y lo dejen en la orilla. La victoria en la Copa del Rey ante el Leganés y el sorteo de ayer que deparó un enfrentamiento ante Ribera de Navarra, su próximo rival, son ya otras cuestiones futuras para un calendario que en enero será de esos intensos y que con la Supercopa de España obligará a los amarillos a hacer un nuevo esfuerzo extra, pero eso es lo que significa estar entre los grandes del fútbol sala y eso es lo que motiva a la marea amarilla a dejarse la garganta por los suyos.