El Puerto Real ha marcado el primer gol de la tarde en el minuto 32 de la segunda parte en un campo que es un lamentable barrizal en el que ni siquiera debió comenzar el encuentro.
El gol en propia puerta de San Bruno se produjo en un batiburrillo en el área azulina.
Día grande de emociones y día grande de fútbol el que se vivirá esta tarde, a partir de las 16.45 horas, en el Sancho Dávila donde se verán las caras el equipo anfitrión el Puerto Real y el San Fernando CD, recuperándose uno de los derbis con más sabor de todos los tiempos. Dos ciudades separadas por apenas diez kilómetros que se unirán para presenciar un duelo que se presenta apasionante.
Los locales quieren prolongar su buena racha en casa, donde han logrado vencer en los dos últimos partidos al Córdoba B y al Sevilla C, mientras que los azulinos aterrizan en el Sancho Dávila con la intención de dar un golpe sobre la mesa y quitarse de encima esa presión de no saber lo que es ganar lejos de La Isla desde el pasado 12 de septiembre, cuando se impusieron en la tercera jornada al Sanluqueño 0-2.
El equipo de Antonio Iriondo no estará sólo en las gradas del feudo puertorrealeño, ya que se espera una presencia masiva de aficionados cañaíllas que quieren acompañar a su equipo y, porque no, regresar con un buen sabor de boca y con tres nuevos puntos en el zurrón que mantengan al equipo en la zona de privilegio. Ya lo anunciaba el presidente del San Fernando CD, José Tréllez, en las páginas de INFORMACIÓN este sábado al señalar que, seguramente, en la grada el equipo azulino iba a golear al verdiblanco. Otra cosa será lo que suceda luego en el campo.
Varias altas
En cuanto a las novedades deportivas del cuadro isleño hay que señalar que el técnico vasco recupera para el derbi a varios de sus lesionados y que dejaron al equipo en cuadro el pasado fin de semana ante el Peñarroya, aunque los que saltaron al terreno de juego demostraron que el bloque no se resiente cuando faltan piezas importantes imponiéndose al cuadro cordobés por 3-0. Así, Iriondo volverá a tener a su disposición a Antonio Sambruno, que ya ha superado el cólico nefrítico que le ha impedido jugar los dos últimos encuentros, el lateral Nono, que vuelve tras varias semanas, e Iván Guerrero, que sufrió un pinchazo hace dos semanas en el encuentro ante el Recreativo B. De tal manera que las únicas bajas serán las de Puli, que este viernes recibió el alta después de operarse de la rodilla en Sevilla, y Canito.
Todo parece indicar que el once que salte al terreno de juego no difiera mucho del que podría ser el formado por David Zamora; Castillo, Nono, Selu, Sambruno; Raúl Silveira, Sachetti, Carlitos, Sergio Beato; Brahim y Noel.
Por su parte, el Puerto Real que entrena Sergio Moguer llega al encuentro después de haber sacado un punto ante Los Palacios, antiguo equipo del actual técnico puertorrealeño, gracias a la actuación del meta Isaac, y cuenta en sus filas con un viejo conocido de la afición azulina como es el caso del sevillano Sergio Berro.
