La plaza de San Bartolomé de Jaén fue el origen de las tres culturas que pasaron por la ciudad, cristiana, judía y árabe, un lugar declarado Bien de Interés Cultural (BIC) que ahora está en el centro de la polémica por las obras de reforma emprendida por el Ayuntamiento.
La sustitución de la tradicional solería de piedra por el granito gris ha levantado las quejas del vecindario y de varios colectivos en defensa del patrimonio. Y en el plano político, el grupo Jaén Merece Más ha exigido a su socio de gobierno, el PP, la paralización de los trabajos.
“La importancia de este BIC es un motivo más para que se cuiden al máximo las intervenciones en esta popular plaza del casco histórico”, ha señalado a EFE Gabriel Ureña, doctor en Historia del Arte y presidente de la Asociación Jaén Historia y Futuro.
En el diseño inicial, el Ayuntamiento de Jaén contemplaba la sustitución de la piedra por granito, un material duro, de adherencia fuerte y barato, “pero su tono gris es antiestético, frío, sucio, poco apropiado para el casco histórico y con fuerte contraste con la actual piedra caliza, colocada en 1958, cuando se talaron álamos y se plantaron naranjos”, dice el profesor Ureña.
La alarma ciudadana hizo que el Ayuntamiento asumiera el compromiso, con la Asociación de Vecinos Arco del Consuelo, de cambiar el granito por una piedra más parecida a la que está siendo sustituida. Y queda por saber el elemento que va a sustituir a la vieja fuente de hierro, así como el tipo de farolas del nuevo alumbrado.
Sin embargo, crecen las protestas ante las evidencias de que el proyecto no ha sido presentado para su aprobación a la Junta de Andalucía, no cumple los protocolos legales establecidos en el Plan Especial de Protección y Reforma Interior del Conjunto Histórico (PEPRI) y tampoco se está realizando un proyecto de intervención arqueológica.
Diferencias en el gobierno municipal
Las obras han abierto fisuras en el gobierno municipal. El grupo Jaén Merece ha instado al alcalde, Agustín González (PP), a que “de forma inmediata” paralice las actuaciones, ya que se trata de una zona del casco antiguo declarada BIC “y es prioritario que se garantice su protección”.
Jaén Merece Más lamenta que no han sido informados, ni tampoco otros colectivos y asociaciones, del proyecto en cuestión, y pide que sea revisado por la Comisión Municipal de Patrimonio. No obstante, el concejal de Obras, Antonio Losa, llegó a indicar que se contaba con el consenso de los vecinos de la zona.
“Las obras en el casco histórico se deben realizar con proyectos muy elaborados que tengan en cuentan la historia, los materiales, la configuración y el entorno de la zona, y también contextualizar la obra en el marco global de un plan de ordenación urbana y mantenimiento del casco histórico”, señala Javier Ureña, que insta a la Junta de Andalucía a analizar el proyecto.
La plaza de San Bartolomé tiene edificios notables como la que fuera Casa del Conde del Águila, conocida como la Casa del Miedo. Pero el más significativo es la iglesia de San Bartolomé, de origen medieval, con lexicografía gótica, mudéjar, renacentista y barroca, y con fachada con diseño atribuido a Eufrasio López de Rojas, autor de la portada de la Catedral de Jaén.