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Jaén

Jaén vibró con un sentido e histórico Miércoles de Ceniza

El Santísimo Cristo de las Aguas presidió el Vía Crucis organizado por la Agrupación de Cofradías de Jaén

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Inicio del Vía Crucis.

El Cristo de las Aguas presidió el Vía Crucis.

Celebración de la misa de imposición de ceniza.

Celebración de la misa de imposición de ceniza.

La Catedral de Jaén regaló estampas únicas.

El traslado de ida dejó momentos inolvidables.

Paso de la hermandad por Carrera de Jesús.

Atardecer de un Miércoles de Ceniza.

Llegada a la Catedral de Jaén.

Llegada a la Catedral de Jaén.

Parecía que nunca llegaría esta fecha, pero al fin fue degustada por los cofrades de Jaén, y más concretamente por los hermanos de la Hermandad de la Sagrada Lanzada. El Miércoles de Ceniza se vivió en Jaén como siempre, con mucha intensidad, recogimiento, fe, devoción y un cosquilleo que nos indica que la cuenta regresiva hacia un nuevo Domingo de Ramos ya está iniciada.

Un Miércoles de Ceniza que comenzó a sentirse con especial emoción a partir de las 17:30 horas. Era el momento en el que el Santísimo Cristo de las Aguas cruzaba la lonja de la parroquia de la Inmaculada y San Pedro Pascual. Sobre una nueva parihuela, estreno en esta jornada, que permitía que el Señor cruzara su mirada con los jiennenses que salieron a su encuentro a primera hora de la tarde. Los rayos de sol regalaban una estampa única, que favorecía al recogimiento y emoción de los primeros instantes del traslado hacia la Santa Iglesia Catedral.

El cortejo avanzó por la Carrera de Jesús, realizando varias paradas en puntos clave, como el Seminario Diocesano, el Camarín de Nuestro Padre Jesús o la residencia de mayores ‘Condes de Corbull’. Momentos que jamás olvidarán los cofrades de esta joven hermandad jiennense, que ya sueña con la mañana del Jueves Santo de 2025.

Accedía el cortejo a la Catedral de Jaén, posteriormente, para situar las andas del Cristo de las Aguas sobre el altar mayor del templo catedralicio. Allí esperaba el obispo de la Diócesis de Jaén, Sebastián Chico Martínez, encargado de oficiar la misa de imposición de la ceniza. Una Eucaristía solemne, a la que asistieron numerosos jiennenses.

Al término de la misma, el cortejo se formó en las naves de la Catedral de la Asunción para iniciar el Vía Crucis de este Miércoles de Ceniza. Este, un año más, estuvo organizado por la Agrupación de Cofradías y Hermandades de la Ciudad de Jaén, y presidido por la imagen del Santísimo Cristo de las Aguas.

Fue un Vía Crucis participativo, en el que jugaron un papel clave los grupos jóvenes de varias cofradías de Jaén, así como la Pastoral Universitaria o miembros del Seminario Diocesano. Entre los 14 misterios, el ensamble vocal ‘Magnum Ensemble’, de Granada, acompañó musicalmente, mientras que en el traslado hizo lo propio la Capilla Musical Santo Reino.

Ya bien entrada la noche, el Señor de las Aguas llegaba a su casa para vivir los últimos instantes de intimidad de un Miércoles de Ceniza histórico y para el recuerdo de los cofrades de Jaén y los hermanos de La Lanzada.

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