Con los números en la mano el Real Jaén es el mejor equipo de la segunda vuelta después de consumir seis jornadas. El resbalón en Motril de la semana pasada podría ser hasta anecdótico si no fuera porque la diferencia respecto al Torremolinos es abultada y creció tras las jornada pasada. Pero el inicio de la segunda vuelta y este tercio de la misma ha servido para que el equipo de Emilio Fajardo recorte tres puntos respecto al líder de la categoría y cuatro con el Torre del Mar. A pesar de esos buenos resultados, que vienen desde mucho más atrás, la vida parece que sigue igual, pero si el prisma se agarra desde la perspectiva adecuada, el Real Jaén está en un trayecto que tendrá que continuar consumiendo jornadas para acercarse al objetivo del ascenso directo o entrar lo mejor colocado posible en el play off, que tiene premio en tratar de reeditar la clasificación para disputar la Copa del Rey como segundo clasificado.

La llegada del Torreperogil invita a un derbi en el que el Real Jaén quiere recuperar la sensación que ha mantenido durante cinco jornadas consecutivas al celebrar victorias. Se cortó en Motril, pero es que los granadinos también han tenido un inicio de segunda vuelta en el que se encuentran invictos, como los jiennenses. Los rojillos acuden con unos guarismos muy desdibujados respecto a la primera vuelta del campeonato. Solo cuatro puntos en esta segunda sesión parece que lo hacen un rival al que el Real Jaén le puede hincar el diente, pero nada más lejos de la realidad. Para tumbar a los de Valenciano habrá que realizar un partido muy serio como ya se demostró en el Abdón Martínez Fariñas y esa es la premisa de un Real Jaén, que pese a estar invicto, ser el mejor de la segunda vuelta y no conocer la victoria desde el pasado 25 de noviembre no pueden dar concesiones a su rival.

Para recuperar el terreno perdido, el Real Jaén tiene también que apretar los dientes y ponerse ese mono de trabajo, como se suele decir, con el que abordar el reto de cazar a un líder que parece que tiene pocas fisuras. Fajardo recupera efectivos para el encuentro contra el Sporting, pero no quiere forzar a Mario Martos para evitar un recaída del jugador, que ya está trabajando con el grupo con la misma intensidad que todos ponen.

Un partido para recuperar el paso perdido en el Escribano Castilla, para mantenerse líder, pero también para hacer bueno el dicho de que el camino es muy largo y que todos se encontrarán piedras en el camino. El Real Jaén no las pudo esquivar en la primera vuelta y ahora, con una plantilla muy reforzada, mira de otra forma porque los imposibles no existen. Eso sí, los blancos quizás deberían acelerar aún más, quién sabe si con una victoria contundente, sobretodo para avisar al Torremolinos de que eso de liderar la segunda vuelta del campeonato no es una casualidad en La Victoria y así hacerle sentir al primero de la fila algún miedo a perder el terreno que tiene ganado respecto a sus perseguidores, porque con dudas, seguro que los malagueños se crecerán más.