Van a pensar que es una casualidad. O habrá quien diga que es causalidad. Quizás el segundo término es más adecuado en esta historia que tiene al Real Jaén de por medio. También habrá quien piense que esto es como la cofradía del clavo ardiendo o una estadística, pero la historia muchas veces se repite. En el mundo del fútbol pueden estar ustedes seguros de que sucede más de lo que se pudiera pensar.
Ahora que el mundo del balón está con los ojos puestos en la Champions League muchos aficionados en sus redes sociales subrayan cuestiones que pueden parecer hasta una utopía, pero que son tan reales como la vida misma. En esto de la Copa de Europa podríamos significar, a modo de ejemplo, que el Real Madrid estuvo 32 años sin levantar el trofeo hasta que llegó a una final en Holanda y levantó la séptima en 1998. País donde los blancos habían perdido una final en Amsterdam en 1962, pero que en la tercera edición de la competición ganaron al Milán por 3-2 en Bruselas en 1958. Coincidencia sin duda. Pero quizás donde la historia se puede decir que se repite es en las dos finales que ha disputado el Borussia Dortmund. El equipo alemán, primer campeón del máximo galardón continental sin ser campeón (antes solo la disputaban los campeones de Liga), ganó en 1997 su primera y una Champions League al derrotar 3-1 a la Juventus de Turín. ¿Saben que ocurrió aquel año? El Real Jaén firmó con un partido de antelación el ascenso a Segunda División tras aquel gol de Rodri en Figueras, donde daba sus últimas patadas al balón el Lobo Carrasco, en la liguilla de ascenso que se disputaba. Curiosidad tal vez, porque fue antes del último partido.
Pero esta curiosidad alemana ha perseguido la historia del Real Jaén también en otra ocasión. El 25 de mayo de 2013 y en el estadio de Wembley en Londres se medían el Borussia de Dortmund y el Bayern de Múnich. Dicho sea de paso, el escenario que albergará la final de este año de la máxima competición continental. Allí ganaron los muniqueses por 1-2 ante el que estaba siendo el equipo que más dificultades le ponía en la Bundesliga. ¿Saben qué pasó en el Real Jaén aquel año? Pues apareció Raúl Gaitán para sacar bajo palos un disparo del Huracán de Valencia después de que Santi Villa enviara un penalti al poste. Aquel despeje hizo bueno el gol de Migue Montes en tierras valencianas para firmar el ascenso a Segunda División. Entonces los goles fuera de casa tenían valor doble en la repesca de las eliminatorias por el ascenso a donde lo envió el Alavés en la eliminatoria de los campeones. El Real Jaén ascendió empatando los cuatro encuentros, primero ante el Lleida y después ante el Huracán de Valencia.
La lógica dice que elucubrar así parece que no tiene sentido, pero el mundo del fútbol tiene paradojas tan extrañas como hasta una Champions League que ganó el Manchester United en 1999 en el Camp Nou cuando el Bayern de Múnich estaba casi celebrando el título y en dos minutos vivió una derrota de esas increíbles. Había mucho en juego, está claro, como lo habrá este fin de semana en el Torremolinos-Málaga City y en el Polideportivo El Ejido-Real Jaén. Curioso también.
