En el día de mañana se acumularán ya
seis miércoles consecutivos de protestas de padres y madres de escolares del CEIP Antonio Machado, de Peal de Becerro, que reclaman a la Junta de Andalucía el inicio de las obras para mejorar las instalaciones del centro, ya que entiende que sus hijos “no reciben su educación en condiciones dignas y seguras”, según exponen en un comunicado.
Desde el año 2020, las familias esperan que el Gobierno andaluz inicie las obras de un nuevo edificio, teniendo en cuenta que el actual cuenta con importantes deficiencias, según resaltan los padres y madres a los medios de comunicación. Desde entonces, en cada inicio de curso muestran su disconformidad ante la lentitud de los plazos, sumándose a una profunda preocupación por el estado en el que se encuentran las instalaciones del centro.
Desde el AMPA del CEIP Antonio Machado, en Peal de Becerro, manifiestan su “profunda preocupación y malestar ante la falta de respuestas por parte de la Delegación de Educación y Formación Profesional de la Junta de Andalucía. Tras numerosas movilizaciones, seguimos sin obtener una solución para los problemas que afectan gravemente al funcionamiento de nuestro colegio”.
En un comunicado, la asociación de madres y padres puntualiza varios aspectos, los cuales son recordados cada semana en las protestas. “En primer lugar, queremos desmentir la información proporcionada por la Delegación a algún medio de comunicación, que afirmaba que en este curso ha quedado un aula libre en el centro. Esto es totalmente falso. Lo que ha quedado libre es un hueco de las escaleras, situado en la primera planta, cerrado con pladur, que no cumple con las condiciones mínimas para ser considerado un aula. Hasta el año pasado, este espacio fue utilizado como aula debido a la falta de espacio. Este año al haber un desdoble este espacio ha sido ocupado por la biblioteca, que en años anteriores la biblioteca se encontraba en la planta baja en el espacio pequeño del hueco de la escalera”.
Además, también en este comunicado aclaran que “el salón de actos del colegio fue dividido en dos espacios con paneles de pladur. Uno de estos espacios es utilizado como comedor, mientras que el otro se utiliza como aula, a pesar de no contar con ventilación ni luz natural, y carecer de las condiciones adecuadas para impartir clases. Por lo tanto, el colegio no cuenta con un salón de actos”.
Otro tema que preocupa a las familias es “el retraso en las obras que fueron aprobadas hace ya casi cuatro años y para las cuales se asignó partida presupuestaria. Aunque la ejecución de estas obras tenía un plazo estimado de dos años, hasta la fecha no han comenzado. Tenemos conocimiento de que el Delegado informó que las obras de nuestro colegio estaban entre las cinco prioritarias de la provincia de Jaén, pero a día de hoy, no tenemos ningún indicio de que vayan a iniciarse pronto”. Así, después de 6 miércoles de movilizaciones y de intentar obtener una respuesta, las familias se sientes “completamente abandonados por parte de la Delegación”.