La Guardia Civil ha desarticulado una trama delictiva dedicada al tráfico de armas en la provincia de Jaén. La llamada operación 'Hornos' propicia de momento tres detenciones y la incautación de seis armas de fuego, 400 cartuchos metálicos, además de kilo y medio de pólvora negra y cuatro silenciadores. El móvil de los arrestados era la caza furtiva y la investigación sigue abierta.

Las diligencias y detenidos fueron puestos a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Villacarrillo.

Según detalla la Benemérita en un comunicado, una de las armas recuperadas es un rifle cuyo robo había sido denunciado en Francia. La investigación comenzó con la interceptación de un paquete postal que contenía precisamente el rifle procedente de Francia junto con un silenciador, un visor y munición.

A partir de entonces, los agentes comprobaron que los inculpados estaban, presuntamente, dedicándose al tráfico de arma para fines de caza furtiva. 

Los registros

La Guardia Civil realizó cinco registros el pasado 5 de febrero en Puente de Génave, Santiago-Pontones y Jaén capital. Fue cuando se detuvieron a tres personas.

En lo que concierne a las armas, eran cuatro rifles con silenciadores, dos escopetas —una sin numeración—; cuatro silenciadores para los cañones; tres visores; 400 cartuchos de diferentes calibres; 1.520 gramos de pólvora negra; 746 pistones; 11,5 kilos de puntas diferentes, y material para elaborar silenciadores. 

La operación se enmarca se enmarca dentro del Plan Integral para el Control de Armas de Fuego de la Guardia Civil para evitar el desvío de las armas a grupos delincuenciales o terroristas.