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Jaén

El Ayuntamiento adjudica el alumbrado sin los ex de IMES

Los extrabajadores de la anterior empresa están aún pendientes de juicio

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El Ayuntamiento de Jaén ha adjudicado a la Unión Temporal de Empresas (UTE) ‘Tecdoa Energy/Indra’ el contrato de los servicios energéticos y de mantenimiento de las instalaciones de alumbrado público, semáforos y fuentes ornamentales por 3,8 millones de euros, lo que supone una rebaja de casi el 20 por ciento con respecto al presupuesto inicial previsto por esta Administración de 4,7 millones de euros.


Según informó el concejal de Hacienda y Comunicación, Miguel Contreras, la de esta UTE  ha sido la única oferta que consideraron que prestaría el mejor servicio con todas las garantías, ha apuntado. Por tanto, la UTE Tecdoa Energy/Indra se encargará de prestar el suministro eléctrico y mantenimiento y, además, con una rebaja de 947.422,76 euros (19,79 por ciento) en el presupuesto inicialmente planteado por el Ayuntamiento.


Por ello, ha estimado el ahorro  como considerable para las arcas municipales, a lo que ha sumado el “compromiso de hacer una inversión, en los primeros meses a lo largo del primer año de ejecución de este contrato para renovar muchas de las luminarias", así como de adoptar medidas de eficiencia energética y en lo que se refiere también a la contaminación lumínica.


Por su parte, el PSOE de Jaén ha mostrado su perplejidad porque la adjudicación por parte del Ayuntamiento del contrato de mantenimiento de semáforos, fuentes y alumbrado público no refleje su compromiso con los extrabajadores de la anterior concesionaria.  La viceportavoz socialista, Carmen Guerrero, recuerda el compromiso que adquirió el alcalde de Jaén, incluso en prensa y en varias ocasiones, de subrogar a estos trabajadores en la  beneficiaria del nuevo contrato. “Hemos comprobado que esta promesa ha resultado una estafa y un engaño para estos treinta y cinco trabajadores que han visto cómo el alcalde de Jaén, José Enrique Fernández de Moya, se ha escondido durante estos meses evitando dar la cara y negándoles la posibilidad de subrogarlos en la empresa que resultara adjudicataria”, añade.

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