El mes de marzo aparece en el horizonte con muchas dudas en cuanto a la marcha de la economía aunque también con muchas esperanzas, sobre todo en municipios como los que conforman la comarca de la Janda, donde el invierno deja paso al buen tiempo y con el mismo el aumento del número de turistas, que se espera como agua de mayo en esta comarca que tantos esfuerzos ha realizado en los últimos años para fortalecer el sector turístico.
El análisis de los datos del desempleo correspondientes al pasado mes de febrero deja igualmente un lugar tanto para las dudas sobre los meses que se avecinan, como para la esperanza, dado que ya son varios los municipios donde el índice del paro ha descendido, y en los que sigue aumentando lo hacen pero de forma mucho menos brusca que en los últimos mes del pasado año 2008. Aunque ambos datos, ambos porcentajes, es decir, el aumento o descenso del número de desempleados, es bastante leve, lo cual puede traducirse en que la situación se ha estancado, pues ni mejora, ni empeora. Lo que no sabemos decirles es si este dato es positivo o negativo.
Pero pasemos a la frialdad absoluta de unos datos que siempre esconden el calor de miles de tragedias y sufrimientos. Cada parado, cada mujer desempleada, cada familia castigada por la crisis económica de la que, por lo visto, nadie es culpable, cada persona que no logra subsistir o se mantiene en el alambre para mantener a su prole, guarda una historia de sufrimientos que por supuesto, no aparece reflejada en estas gélidas cifras que remiten gélidas administraciones.
En primer lugar, analizaremos los datos del paro registrado en febrero con respecto al mismo periodo del mes anterior. En este caso, enero. Barbate ha pasado de 4.518 desempleados a 4.500, lo que se traduce en un descenso del 0,29%. Por su parte, el municipio de Conil ha visto incrementada la nómina de parados en un 1,26%, al contar con 2.326 desempleados en febrero por los 2.297 del pasado mes de enero. Vejer roza casi el equilibrio pues ha visto aumentado el número de desempleados en un 0,18 %, algo ínfimo como vemos, es decir, actualmente cuenta con 2.237 desempleados, mientras que en enero esta cifra era de 2.233 parados.
En cuanto al análisis por género y edad, en Barbate, el número de hombres parados es de 1.867 y el de mujeres de 2.633, mientras que de los 4.500 desempleados, 581 son menores de 25 años por 3.919 mayores de este mismo baremo. En Conil, el número de varones desempleados es de 1.257 por 1.069 mujeres, y del total de 2.326 parados, 316 son menores de 25 y 2.010 mayores. Por su parte, en Vejer el número de parados varones asciende a 1.039 por 1.198 mujeres, y del total de 2.237 desempleados, 306 son menores de 25 y 1.931 mayores de este baremo.
Por último, desengranamos los datos del desempleo en cuanto a sectores económicos, la construcción, servicios y la agricultura, siguen siendo los sectores que más personal aporta al desempleo. El orden varía según el municipio. En este sentido, en Barbate 1.910 desempleados provienen del sector servicios y 769 de la construcción. En Conil, 1.021 provienen del sector servicios y 709 de la construcción. Por otro lado, en Vejer, 905 provienen del sector servicios y 547 de la construcción.