El triunfo arrollador de Juan Espadas en las primarias del domingo de San Antonio -el mal fario del 13, cual barrunto de gitana trianera-, se transformaba, ayer, en el Barceló Renacimiento de Sevilla, con la presencia estelar de José Luis Ábalos, en el comienzo de la nueva era del socialismo andaluz. El pretexto era la ponencia marco sobre municipalismo, que diseccionará longitudinalmente el debate protagonizado por urbanitas y ruralistas en el marco del 40º Congreso Federal que se celebrará a mediados de octubre en Valencia, aunque hasta el que asó la manteca colorá en San Vicente 37 sabe que lo que Ábalos, Espadas y cía. se traían entre manos era la orden de inmediato desahucio del susanismo. Ni laminación, a través de la ignominiosa imposición de una gestora, ni enroque desde la presidencia del grupo parlamentario, donde conserva mayoría de fieles, hasta el cónclave regional de diciembre. “Salir por puerta, no ser arrojada por la ventana”, esa era la clave de bóveda, el equilibrio posible, como publicaba el medio paisano Antonio Avendaño. “Se me está muriendo divinamente. ¡Qué irse, qué apagarse!”. El viernes, en discreto encuentro, Juan Espadas y Susana Díaz consensuaban un traspaso civilizado de poderes. La jiennense Ángeles Férriz, directora de campaña del triunfante presidenciable, ocupará la portavocía parlamentaria, en tanto otras figuras descollantes en el universo amanecista del espadismo, como la onubense María Márquez, la gaditana Araceli Maese y el granadino Gerardo Sánchez la secundarán. Comoquiera que el acuerdo se refrenda, este lunes, en la permanente de la ejecutiva del PSOE-A, se presume que, a partir de ahora, nadie, salvo ellos, hable públicamente en nombre del partido. No hace tanto, cuando se intentó infructuosamente que el trámite de las primarias se saldase unívoca e incruentamente, Ferraz ofreció a Susana el premio de consolación de la presidencia del Senado.
“Alcalde, todos somos contingentes, pero tú eres necesario”. El regidor de Sevilla es consciente del papel que debe de jugar Ángeles Férriz, que ya fue con Susana, antes de que los dedos le parecieran huéspedes, efímera portavoz de San Vicente 37. “Sabía lo que arriesgaba”, me reconocía en una entrevista, el miércoles, la política carolinense. Férriz lleva tiempo haciendo tándem armonioso en Jaén con Juan Francisco Serrano, uña y carne, con Paco Reyes ejerciendo de atento padrecito. Rienda suelta, sin que nada escape a su conocimiento. El éxito de las primarias allana el futuro en el proceso interno que vivirán los socialistas de Jaén. Que Felipe Sicilia tuviera que dar marcha atrás bosqueja un itinerario distinto al que trazaba la resistencia aquella que jaleaba a Dani Campos al ser despojado de la secretaría general del PSOE de Linares, antes de que en unas primarias, meses después, fuese incapaz de recuperar el cargo ante su secante y liquidador Javier Perales. “Mira tú, qué gracia, cojito para toda la vida”. Felipe Sicilia, con todo, sigue siendo un valor sólido y cotizado del socialismo patrio en el Congreso, por más que su tiempo en Andalucía y Jaén, a la vista está, todavía no hubiera llegado.
Ni el sabio y saludable surrealismo de José Luis Cuerda ni el muy cercano fin del uso en exteriores de la mascarilla impedirán que la consumación, mañana, del indulto a los presos del procés enerve hasta el paroxismo a las derechas. “¿Dónde se firma contra los catalanes?”, proclaman ante las mesas petitorias los menos dados a la retórica. Los pliegos de firmas recogidas la pasada semana en los mercadillos jiennenses todavía se remiten a San Clemente. Que el PP de Erik Domínguez en la Jaén rural, propalando la llama murciana reunificadora de Teo García Egea, abra los brazos a sus hijos pródigos, invita al alcalde de Porcuna y alma máter del patuco naranja, Miguel Moreno, a fotografiarse en su Facebook, con mascarilla, bajo el título: “Yo me quedo. Ciudadanos”. Frente a la realista tozudez del control racional, el elogio de un subconsciente que se niega a claudicar. Juan Marín, el miércoles, en Granada, arropaba a Luis Salvador. "Aquí no hay ni Dios. ¿O es que todos son aquí unos hijos de puta? Porque pueden ser unos hijos de puta que se hacen pasar por fantasmas". La plataforma ciudadana ‘Jaén Merece Más’ se acaba de dirigir a la Comisión Europea por "el oscurantismo" con que la Junta de Andalucía y el Gobierno de España están gestionando los 443 millones de la ITI de la provincia de Jaén. Dicen que ya está casi todo gastado y ni nos hemos enterado. Ni pedagogía ni leches. Ni siendo amanecista hasta las trancas te libras del disgusto. “Calabaza, yo te llevo en el corazón”.
Aclaración. Casi todas las frases entre comillas y en cursiva de este artículo pertenecen a la mítica película de José Luis Cuerda: ‘Amanece, que no es poco’.
