El secretario general de Medio Ambiente, Agua y Cambio Climático de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, Sergio Arjona, ha realizado una visita técnica a los embalses de Guadalcacín y Zahara, ambos en la provincia de Cádiz, donde se están realizando labores encaminadas a “mejorar estas infraestructuras que cumplen un importante papel en la gestión de los recursos hídricos”. Arjona ha explicado que “estas obras suponen adaptar las presas, puestas en carga en la última década del siglo XX, a la nueva normativa de seguridad que afecta a los embalses” y ha recalcado que, “de esta forma, se logra aumentar la seguridad para las poblaciones que se encuentran aguas abajo en caso de avenida”.
El director general de Infraestructuras del Agua, Álvaro Real, ha explicado que, en ambas presas, los proyectos de mejora en los que se está trabajando actualmente “contemplan la ejecución de un cuenco amortiguador adecuado a las condiciones de cada embalse que disipa la energía del agua en su vuelta al río cuando se dan las condiciones para aliviar recursos”. “Si el agua llega al cauce con demasiada fuerza se daña los taludes naturales pero, al reducir su energía con este sistema de amortiguación, protegemos en mayor medida la zona donde se produce la incorporación de los recursos que proceden del embalse”, ha indicado.
En el caso de la presa de Guadalcacín, el proyecto de mejora contempla además la prolongación del aliviadero (canal de descarga y trampolín) hasta la cota del cauce del río. Las obras en este embalse, iniciadas en verano de 2021 y con un plazo previsto de obras de 14 meses, incluyen medidas como la protección de la solera mediante escollera hormigonada y la construcción de taludes en el cauce del río Guadalcacín. Además, también se contempla un paso sobre el trampolín ya existente para comunicar los dos lados del aliviadero. En total, el coste de las labores asciende a 2,5 millones de euros cofinanciados por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder).
El embalse de Guadalcacín es el segundo embalse más grande de Andalucía y suministra agua a la campiña de Jerez y a la Costa Noroeste para al riego de explotaciones agrícolas. Esta infraestructura pertenece a la Demarcación Hidrográfica del Guadalete-Barbate y su capacidad ronda los 800 hm³.
