¿Han vuelto las carreras ilegales a la zona sur? Los vídeos de las cámaras de seguridad y los informes policiales dicen que no. ¿Los hechos deslegitiman las reivindicaciones de los vecinos? Tampoco. Lo que hay, de un lado, son compromisos municipales pendientes y, del otro, un relato que ha quedado desmontado por la vía de las imágenes y alentado, según el Gobierno local, por “un miembro de la ejecutiva del PSOE que ha pinchado en hueso”, según resaltaba este viernes en el pleno el delegado municipal de Seguridad, Ignacio Martínez.
“Lo de las carreras ilegales no es cierto”, señalaba rotundo, “Lo tenemos todo grabado”, certificaba. Desde la celebración del Mundial de Motos, cuando se estableció un amplísimo dispositivo que disolvió las quedadas organizadas desde BikeLife -el 22 y 23 de marzo-, se volvieron a repetir tres intentos las noches de los días 30 de mayo, y 1 y 2 de junio, “pero no estuvieron más de diez minutos”. En este caso no se trataba de una “quedada” organizada por redes, “que son las peligrosas”, puntualizó, “sino dos tontos que en cuanto ven aparecer a la policía se van”.
Desde entonces, hasta esta pasada semana sólo ha habido dos incidencias menores, según los informes policiales. La noche del domingo pasado, sobre las 23.20 horas, protagonizada por cinco motoristas que al ver a la Policía se van en menos de diez minutos, y en la madrugada del pasado jueves, pasadas las doce y media de la noche, tras denuncia de un vecino que alertó de la presencia de dos motoristas en la explanada del Campo Pedro Garrido “haciendo el tonto”, que se marchan al ver llegar a la policía.
Nada más, según Martínez, que lamenta la “manipulación y la mentira”, en entredicho a partir de las imágenes de las cámaras de seguridad instaladas en la Avenida Blas Infante y en García Caparrós, sin olvidar el uso de drones en la zona por parte de la Policía Local para una mejor identificación en caso de que se ponga en riesgo la seguridad vial.
No obstante, eso no quita que los vecinos sigan reclamando más medidas de seguridad en previsión de futuras quedadas más peligrosas, y ahí el delegado también les da la razón. “Cuando llegamos había un documento en el que solicitaban mejoras en temas de movilidad, aparcamientos en batería, badenes pronunciados, que hasta ahora no hemos podido afrontar, pero tenemos un plan para empezar esta misma semana”, señala Martínez.
La primera medida será poner los aparcamientos en batería en García Caparrós para que en vez de cuatro carriles haya solo dos. Además, se va a proceder a la retirada de los bancos y a instalar badenes de asfalto para limitar la velocidad de los vehículos, una medida que está prevista antes de fin de año.
Asimismo, ha reiterado el refuerzo policial en la zona para actuar de forma disuasoria, así como que se están teniendo en cuenta las aportaciones de ideas en materia de seguridad que los propios cuerpos policiales están realizando para mejorar el control