En el actual clima económico, el Gobierno debería enfocarse en proyectos de construcción públicos que tengan un claro objetivo social y puedan generar crecimiento económico a largo plazo. Para el Progressive Democratic Party (PDP) es cuestionable si el proyecto del aeropuerto y otros del sector público en los que el Gobierno se encuentra actualmente embarcado, cumplen estos criterios.
En vista del coste, superior a 30 millones de libras, del proyecto anunciado el pasado lunes desde Convent Place, los progresistas han reiterado su solicitud de que las fechas y extensión del mismo sean revisadas. Para el PDP aunque tiene sentido que se proceda con algunos trabajos, las obras de la terminal a su criterio deberían ser pospuestas o minimizadas para reducir los gastos financieros del Peñón.
Los efectos de la actual situación financiera global son aún inciertos y comenzarán a sentirse en los próximos meses, señalan los progresistas, por lo que añaden que ante tales datos no sería por parte del ejecutivo gibraltareño prudente actuar con estos proyectos tan grandiosos.
Con estas declaraciones el PDP no quiere insinuar que el Nº6 debería abandonar sus planes para el aeropuerto, sino simplemente posponerlos y si en los próximos meses se aclara la situación y se comprueba que los grandes compromisos financieros son posibles, revivirlos.
"De momento y en vista de que no hay un incremento en los vuelos, la decisión parece basada en una imposibilidad de admitir que seguir el curso programado en este proyecto no es la mejor actuación", señala el PDP, concluyendo que los contribuyentes gibraltareño no pueden tener un Gobierno que toma decisiones basadas en su deseo de ir sumando proyectos propios antes que en las planificaciones económicas.