El Gerena, que jugó más de treinta minutos con un jugador más sobre el campo, venció 4-1 al Xerez  CD y mira hacia la zona noble de la tabla clasificatoria.
CD Gerena: Vallés; Moisés, Oreca, Jorge, Toni Sánchez (Chuli, minuto 46); Ismael, Raúl Vega (Kiki, minuto 69), Pavón , Medina (Rafa Valderas, minut0 85), Migue y Navarro.
Xerez CD: Zamora; Guerrero, Ángel, Isra, Chato; Agu (Paco Borrego, minuto 65), Javi; Quirós (Albino, minuto 65),  David Narváez, Juan Benítez y Guille (Antonio, minuto 90)
Arbitró José Álvarez que perjudicó ostensiblemente al Xerez. Amonestó a los locales Jorge y Oreca y a los visitantes Ángel, Paco Borrego (cuando aún estaba en el banquillo), Guille y en dos ocasiones a Guerrero, expulsado en el minuto 57, y también al técnico Vicente Vargas, que tuvo que abandonar el banquillo en el minuto 67. La primera tarjeta a Guerrero se la mostró de manera equivocada porque pertenecía a otro jugador.
1-0. Minuto 18. Toni Sánchez, de falta directa y sorprendiendo a Zamora.
1-1. Minuto 44. Juan Benítez, que ganó en velocidad a la zaga.
2-1. Minuto 61. Ángel en propia puerta.
3-1. Minuto 84. Medina
4-1. Minuto 90. Pavón
Partido matinal disputado en el Juan José Romero Gil con buena entrada, el registro habitual en los partidos de casa del CD Gerena.
El fútbol son dinámicas y cuando un equipo, como es el caso del Xerez Club Deportivo, entra en una dinámica negativa todo se le vuelve en contra. El arbitraje navegó casi siempre en contra de los intereses azulinos; la suerte estuvo esquiva y el esfuerzo no tuvo premio. En una acción a balón parado, Toni Sánchez sorprendió a Zamora y adelantó a los locales en el marcador. El partido siguió el ritmo impuesto desde el principio, pero Juan Benítez le metió una velocidad más para establecer sobre el pitido del final del primer tiempo el esperanzador empate a 1.
En la segunda parte las fuerzas estaban igualadas, el Xerez controlaba de mediocampo hacia atrás, pero cuando los de Vargas parecían tomar algo más el mando llegó la expulsión de Guerrero, que vio una primera amarilla equivocada, y el equipo se quedó en inferioridad con casi media hora por delante. Para colmo de males, en un balón sin peligro Ángel despeja y lo introduce en su propia puerta. Los intentos ya resultaron vanos y llegaron dos goles má