El polideportivo Kiko Narváez, en la barriada de La Granja, da cobijo a 130 personas de orígenes diferentes, todas ellas de países subsaharianos, que fueron rescatadas del mar en los últimos días y que, tras su paso por dependencias policiales, han sido puestas en libertad y derivadas a Cruz Roja Española para que le preste ayuda humanitaria.
La actuación ha sido coordinada con el Ayuntamiento y se ha llevado a cabo durante todo el fin de semana con el objetivo de dar respuesta a una situación que se considera “excepcional”, si bien no se descarta que pueda llegar a repetirse a lo largo de las próximas semanas.
Está previsto que estas personas empiecen a abandonar estas instalaciones deportivas a lo largo de este lunes para desplazarse a otros destinos del país en el que ya residen familiares o amigos.
Tanto el pabellón Kiko Narváez, en Jerez, como el centro naútico Elcano, en Cádiz, han completado de manera extraordinaria las plazas de acogida con las que cuenta Cruz Roja en su centro para personas inmigrantes del Campo de Gibraltar. La organización les ha ofrecido por tanto espacios para descansar, atención y orientación por parte de trabajadores sociales, el acompañamiento del voluntariado, artículos de higiene y alimentos.
También se les ha facilitado puntos de acceso a internet y telefonía para que pudieran ponerse en contacto con sus allegados. Por último, Cruz Roja Española les ha facilitado el traslado a otros destinos, donde cuentan con familiares o redes sociales.
En el caso concreto de Jerez, el “albergue provisional” del polideportivo Kiko Narváez fue habilitado en la mañana del sábado, atendiendo ya ese día a 72 personas. A lo largo de este domingo se han incorporado otros 58 migrantes, hasta completar la cifra ya referida de 130.
Para el montaje de este albergue provisional se han recibido mantas y camas de Cruz Roja Española en Almería, Málaga y Madrid. Además, los supermercados Carrefour Norte y Sur de Jerez han donado alimentos y artículos de higiene para ambos centros de acogida temporal. Cruz Roja quiere dar las gracias por estas donaciones, así como a los ayuntamientos que han cedido los espacios. La institución agradece igualmente los numerosos ofrecimientos de la ciudadanía para colaborar en el dispositivo, sobre todo para ayudar con las traducciones de francés. Todas estas personas se han incorporado a los equipos de voluntarios y voluntarias y gracias a ellas, se han podido cubrir todas las necesidades de traductores. La organización ha movilizado a todo su voluntariado y equipo técnico en la provincia para ofrecer una atención las 24 horas en ambos centros y de este modo poder ofrecer una respuesta eficaz a esta situación extraordinaria.