En la
Protectora de animales de Málaga están acostumbrados a encontrar a las puertas de la misma numerosos gatos o perros abandonados, pero este miércoles, lo que los voluntarios del turno de tarde encontraron al entrar fue algo inaudito:
una boa constrictor enroscada dentro de un
terrario de cristal, sobre cuya tapa, sujetada
con cinta de embalar, se había colocado
un transportín con un gato.
Según ha relatado a Viva Málaga la presidente de la Sociedad Protectora de Animales y Plantas de Málaga, Carmen Manzano, ambos animales se encontraban
bajo el fuerte sol de las horas centrales de la tarde con casi 40 grados de temperatura
sin ningún documento que los identificara.
Manzano asegura que no podían meter el reptil, que no saben si habrá sido introducido en España de manera legal cumpliendo con la normativa CITE o de forma clandestina, por lo que fue entregado en el Zoosanitario municipal desde donde lo más probable es que se entregue al CREA, al Centro de Recuperación de Especies Amenazadas de Málaga.
Manzano se pregunta hasta dónde se va a llegar con el tema de las especies exóticas en las casas que cuándo ya no se quieren, se sueltan, como en este caso, en mitad del campo, asegurando lo desastroso que hubiera sido si se hubiera llegado a escapar, algo que define muy gráficamente:
“Imagínate una boa constrictor suelta por los Montes de Málaga”.
Al menos, el gato es un ejemplar adulto que se encontraba en buen estado, auqnue supone un nuevo inquilino más para un refugio superpoblado.