El Pleno del Ayuntamiento de Marbella, en sesión extraordinaria, ha aprobado hoy, con los votos a favor de los grupos del PP y Ciudadanos y las abstenciones de PSOE y OSP, la congelación de los impuestos municipales para 2022. El delegado municipal de Hacienda, Félix Romero, ha subrayado que “bajo ningún concepto vamos a subir los tributos a nuestros ciudadanos”. “Si bien esta medida podría solucionar nuestros problemas de deuda heredada, entendemos que no es compatible con la recuperación que tenemos que impulsar tras la pandemia”, ha apuntado.
Asimismo, ha recalcado que Marbella “es el municipio con menor presión fiscal de la Costa del Sol, con los grandes impuestos municipales más bajos de las ciudades de nuestro entorno”. “Por tanto, tendríamos margen para optar por esta medida, pero no queremos porque nuestra seña de identidad siempre ha sido la de no recurrir a la opción fácil de subir los tributos”, ha señalado. Romero ha comparado las tasas marbellíes con la de otras localidades, como en caso de las urbanísticas, “que se encuentra en nuestra ciudad entre el 0,3 y el 0,7 por ciento frente al 1,1 por ciento de Estepona, el 2,7 por ciento de Torremolinos y el 3 por ciento de Mijas”. “También ocurre en el IBI urbano, ya que mientras aquí se encuentra en el índice del 0,631, en lugares como Estepona se sitúa en el 0,662, en Torremolinos, en el 0,75 y en Mijas, en el 0,724”, ha precisado.
Además, ha vuelto a mostrar el rechazo del equipo de Gobierno a la propuesta del Gobierno central de gravar con un 150 por ciento el IBI de las segundas residencias. “Con esta medida se solucionarían todos nuestros contratiempos económicos a corto plazo ya que más de la mitad de nuestras viviendas son de esta tipología, lo que podría triplicar la recaudación por este tributo en nuestro municipio”, ha manifestado el edil, quien ha añadido que “en cambio estaríamos ocasionando un daño irreparable a la ciudad, cortando las posibilidades de crecimiento y ahuyentando a los titulares de estos inmuebles, que invertirían en otras localidades”. “Preferimos apretarnos el cinturón, invertir en el futuro y atraer a estos inversores”, ha resaltado el concejal, quien también ha destacado que “nos convertimos en la primera Corporación que acuerda no aplicar esta subida”. También ha solicitado al Ejecutivo de la Nación que “siga nuestro ejemplo y congele sus impuestos, aunque desgraciadamente ya en el proyecto de presupuestos establece una subida de casi el 10 por ciento en recaudación, además de la subida a los autónomos”.
Por otro lado, el Pleno ha dado luz verde a una propuesta de modificación presupuestaria para hacer frente al pago de sentencias judiciales en el ámbito de Personal. En este punto, Romero ha recordado que esta situación, unida a las deudas firmes generadas en la época GIL, “nos colocó en la tesitura de estructurar desde nuestro departamento económico estos pagos para garantizar la viabilidad del Ayuntamiento, sin restar servicios, ni subir impuestos ni afectar a la plantilla municipal”. “Realizamos un trabajo ingente para detectar y contabilizar todo lo pendiente tanto de Asesoría Jurídica como de la delegación de Recursos Humanos, llevando a cabo una planificación, que incluía en primer lugar el pago de 43 millones de euros a través del mecanismo del Fondo de Reordenación y, posteriormente, afrontar la liquidación de deudas por sentencias en la otra área citada, que es lo que hemos traído hoy a Pleno”.
En este sentido, ha explicado que “desde verano estamos realizando gestiones para que antes de que finalice el año se abonen estas deudas”. “Y para ello monitorizamos las partidas sobrantes de las diferentes áreas municipales que difícilmente, por cuestiones principalmente de la pandemia, se podrían ejecutar en el último trimestre del año, como cursos presenciales o los fondos protocolarios de Derechos Sociales, entre otras”, ha remarcado el edil, quien ha incidido en que “no tocamos otras partidas y es falso que se destinen 180.000 euros de ayudas”.