La Sección Tercera de la Audiencia de Málaga tiene previsto juzgar a partir de este lunes a nueve personas por su presunta relación con el robo de más de cuatro millones de euros en joyas y otros objetos en un centro comercial de Puerto Banús, en la localidad malagueña de Marbella. Uno de los acusados, aunque no por el fiscal, es Miguel Montes Neiro, conocido como el preso común más antiguo de España, según han informado fuentes judiciales.
Los hechos sucedieron el 18 de noviembre de 2012. Tres de los acusados se pusieron de acuerdo para llevar a cabo este robo, según la acusación pública, a la que ha tenido acceso Europa Press, teniendo como cómplice a uno de los vigilantes de seguridad, también procesado, que previamente había cambiado el turno para estar trabajando el día fijado.
Según el fiscal, esos tres acusados se presentaron a primeras horas de la tarde en la puerta de empleados del centro comercial como supuestos trabajadores para hacer obras, y lograron entrar gracias a la ayuda del vigilante. Se pusieron pasamontañas para no ser identificados y apuntaron con un arma al jefe de seguridad y al auxiliar, a los que ataron y colocaron cinta adhesiva en la boca.
Hicieron lo mismo, señala el ministerio público, con tres trabajadores que realizaban obras para un local. Los dos vigilantes y los empleados, que estaban atados y a los que pusieron una capucha de tela en la cabeza, permanecieron retenidos en una sala hasta las 19.30 horas. Asimismo, los procesados cogieron las grabaciones de las cámaras de seguridad y todo tipo de llaves de la zona de joyería.
El fiscal señala que se apoderaron de joyas y relojes de gran valor. Así, el valor de lo sustraído y recuperado asciende a 2,3 millones de euros; mientras que lo no recuperados supone 2,4 millones de euros. Tras esto, los tres acusados dejaron maniatados a las cinco personas y abandonaron el lugar, quedándose el vigilante acusado en el centro, "aparentando haber sido víctima de estos hechos".
Asimismo, la Fiscalía señala que los procesados contactaron con tres personas, a las que también acusa, a los que ofrecieron las joyas y relojes. Se indica que uno de ellos adquirió varios objetos procedentes del botín y a dos mujeres se les intervino en los registros de las viviendas en las que residían --una de ellas junto a un acusado-- algunas piezas, conociendo que eran del atraco.
Por estos hechos, el ministerio público acusa a cuatro procesados de un delito de robo con violencia y de cinco de detención ilegal; mientras que a tres de ellos se les achaca, además, un delito más de robo por un coche sustraído. Las penas solicitadas oscilan entre los 41 y los 34 años de prisión. También acusa a tres personas por receptación, solicitando entre dos y un año y medio de cárcel.
En su momento, el fiscal no acusó a Montes Neiro, que fue detenido e imputado en el transcurso de la investigación policial y judicial; aunque sí lo acusan una empresa de joyería y dos aseguradoras, personadas como acusación particular, que solicitan un año o un año y cuatro meses por un delito de receptación, al situar su participación en el momento de ofrecer el botín.