Un avión militar ruso Su-34 se estrelló este lunes en el patio de un edificio residencial en la ciudad balneario de Yeisk, cerca de Ucrania y bañada por el mar de Azov, y causó la muerte de al menos tres personas, así como 21 heridos, según las autoridades.
"Se sabe con seguridad de tres fallecidos", señaló la vicegobernadora del territorio de Krasnodar, al que pertenece Yeisk, Anna Minkova.
El cazabombardero "se estrelló contra el patio de un edificio residencial", según indicó el Ministerio de Defensa de Rusia.
La institución castrense explicó que el accidente se produjo mientras el avión ascendía para efectuar un vuelo de entrenamiento desde el aeródromo del Distrito Militar Sur.
La causa del accidente fue el incendio de uno de los motores durante el despegue, según el piloto, que se catapultó.
Cuando se estrelló en el patio, el combustible del avión se incendió.
El área del fuego se extendió por 2.000 metros cuadrados, pero ya ha sido extinguido, según los servicios de emergencia.
Las autoridades locales y de emergencia hablan de entre 15 y 17 apartamentos dañados por el incendio.
El gobernador de Krasnodar, Veniamin Kondratiev, se trasladó al lugar de la emergencia, según escribió en su canal de Telegram.
El Comité de Investigación de Rusia, dependiente de la Presidencia, abrió un caso penal por el accidente, según la agencia oficial TASS.
Especialistas forenses del Departamento Principal de Investigación Militar han sido enviados al lugar del incidente.
También se trasladaron a Yeisk bomberos, especialistas de la unidad de quemados del hospital regional de Krasnodar y ambulancias.
Unas cien personas fueron evacuadas, según TASS. Los residentes del edificio fueron transferidos a centros de acogida temporal.
El presidente ruso, Vladímir Putin, ordenó al gobernador de Krasnodar, al jefe del Ministerio para Situaciones de Emergencia, Alexandr Kurenkov, y al ministro de Sanidad, Mijaíl Murashko, que vuelen a Yeisk para proporcionar toda la asistencia necesaria a los heridos.