El tiempo en: Jaén
Publicidad Ai

Mundo

Amnistía denuncia los crímenes de guerra generalizados en Sudán por los enfrentamientos

La ONG asegura que los civiles sufren "un horror inimaginable"

Publicidad Ai
Publicidad Ai
  • Campo de refugiados sudaneses en el este de Chad. -

La ONG Amnistía Internacional (AI) ha denunciado crímenes de guerra generalizados en el marco de los enfrentamientos entre las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF), declaradas en rebeldía desde el inicio del conflicto, y el Ejército de Sudán, que "están arrasando el país".

"Civiles de todo Sudán sufren un horror inimaginable cada día que pasa mientras las RSF y el Ejército compiten temerariamente por el control del territorio", ha declarado en un comunicado la secretaria general de AI Agnès Callamard, en referencia al nuevo informe de la ONG 'La muerte llegó a nuestro hogar: crímenes de guerra y sufrimiento de civiles en Sudán'(Death Came To Our Home: War Crimes and Civilian Suffering In Sudan).

El informe presenta pruebas y testimonios sobre el "enorme número de muertes" de civiles tanto en ataques deliberados como indiscriminados, actos de violencia sexual contra mujeres y niñas, ataques selectivos contra infraestructura civil y saqueos generalizados.

"Matan a personas en el interior de sus casas o mientras buscan desesperadamente comida, agua y medicamentos; atrapadas en el fuego cruzado mientras huyen, o tiroteadas deliberadamente en ataques selectivos. Miembros de las partes enfrentadas han violado y sometido a otras formas de violencia sexual a decenas de mujeres y niñas, algunas de tan sólo doce años. No hay lugares seguros", ha manifestado Callamard.

AI ha asegurado que, según los Convenios de Ginebra, se trata de un conflicto armado no internacional, por lo que "las partes se rigen por el Derecho Internacional Humanitario, que trata de proteger a la población civil y a otras partes no combatientes en el conflicto armado, y el Derecho Internacional de los Derechos Humanos".

Algunas de estas normas habrían sido "violadas gravemente", por lo que soldados y mandos individuales "pueden ser considerados penalmente responsables" de crímenes de guerra.

"Las RSF y el Ejército, así como sus grupos armados afines, deben dejar de atacar a la población civil y garantizar el paso seguro de quienes buscan seguridad. Deben adoptarse medidas urgentes para garantizar justicia y reparación a víctimas y sobrevivientes", ha añadido la secretaria de Amnistía.

El informe también ha hecho especial hincapié en la región de Darfur Occidental, donde "la espiral de violencia" ha causado muertes y destrucción "incalculables" por parte de ambas partes contra personas de la etnia masalit. Muchos de ellos se han visto obligados a huir al este de Chad.

De hecho, algunos testigos han informado a AI de que la localidad "había sido atacada por milicias árabes" en apoyo a las RSF.

"El 28 de mayo, decenas de civiles murieron en Misterel, localidad al sudoeste de Geneina, donde estallaron enfrentamientos entre las RSF y sus milicias aliadas, y grupos armados masalit. Sus residentes dijeron a AI que habían enterrado a 58 civiles que murieron ese día", ha comunicado la ONG.

"Seis miembros de las RSF irrumpieron en nuestra casa a las ocho de la mañana y fueron a la habitación donde estaban mi esposo y sus cuatro hermanos y los mataron a tiros a todos (...) Las RSF vinieron luego a la habitación donde estaba yo con mis hijos y otras doce mujeres y niños y niñas (...) Nos pegaron con palos y látigos y dijeron: '¿Dónde están las pistolas?' y luego nos robaron los teléfonos", ha declarado Zeinab Ibrahim Abdelkarim a la organización.

En el informe también se detalla la muerte de civiles tras quedar atrapados en fuego cruzado, pues los contendientes acostumbran a lanzar ataques y a usar armas explosivas en barrios con gran densidad de población.

"Mi esposa y mis hijos huyeron de casa cuando estallaron los enfrentamientos en nuestro barrio (...) pero mis dos hijos menores (...) eran pequeños y no pudieron correr lo bastante rápido (...) No sé quién les disparó. Los ha matado la guerra", ha contado a AI Kodi Abbas.

Además, el informe ha relatado los delitos sexuales perpetrados mayoritariamente, según los testigos, por las RSF y sus milicias árabes aliadas contra decenas de mujeres y niñas, algunas "de tan solo doce años".

A pesar de ello, la ONG insiste en que ambas partes han cometido violaciones contra decenas de mujeres y niñas, y que algunas fueron "retenidas durante días en condiciones de esclavitud sexual".

"No hay seguridad en ninguna parte de Geneina. Me fui de casa porque había disparos por todas partes (...) y estos criminales me violaron. Ahora tengo miedo de estar embarazada (...). No puedo soportarlo", ha relatado una mujer de 25 años.

El documento describe cómo las RSF llegaron a secuestrar a 24 mujeres y niñas, a las que retuvieron durante días en un hotel como esclavas sexuales, y cuyas supervivientes no han tenido acceso a ayuda médica o psicológica.

También ha notificado el saqueo y la destrucción parcial o completa de instalaciones sanitarias y humanitarias en el país, por lo que los civiles están siendo privados de alimentos y medicinas en una situación ya desesperada de por sí.

Una vez más, la mayor parte de estos casos documentados de saqueos han sido llevados a cabo por miembros de las RSF.

Por otro lado, Amnistía ha pedido al Consejo de Seguridad de la ONU que extienda "sin demora" el embargo de armas, vigente en Darfur, al resto de Sudán.

"La comunidad internacional debería aumentar de forma significativa la ayuda humanitaria para Sudán, y los países vecinos deben garantizar que sus fronteras están abiertas a la población civil que busca seguridad", ha pedido Callamard.

"El Consejo de Derechos Humanos debe escuchar los llamamientos de la Autoridad Intergubernamental para el Desarrollo (IGAD) y establecer un mecanismo independiente de investigación y rendición de cuentas para vigilar, recabar y preservar las pruebas de violaciones de Derechos Humanos en Sudán", ha concluido.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN