Doscientas cincuenta y siete personas han sido detenidas en relación con los disturbios iniciados el martes en Yakarta tras anunciarse la reelección del presidente indonesio, Joko Widodo, que han dejado seis muertos y más de 200 heridos, informaron hoy las autoridades.
Los enfrentamientos entre la Policía y centenares de seguidores del candidato presidencial perdedor, el exgeneral Prabowo Subianto, han paralizado el centro de la capital de Indonesia durante dos días y continuaron hasta primera hora de hoy.
Los manifestantes lanzaron anoche fuegos artificiales, piedras y otros objetos contra la Policía antidisturbios, que respondió con gas lacrimógeno, disparos con balas de goma y realizando arrestos selectivos frente a la sede de la Agencia de Supervisión Electoral y sus alrededores.
El portavoz de la Policía de Yakarta, Prabowo Argo Yuwono, indicó en rueda de prensa en la noche del miércoles que los arrestos se produjeron por destruir propiedad pública e incitar a la violencia, y aseguró que forman parte de un plan para provocar los incidentes.
Las víctimas mortales se deben a heridas de bala y objetos contundentes, según la policía, que ha negado el uso de munición real y responsabilizado a los agitadores de utilizar armas de fuego.
El número oficial de heridos es 200, aunque fuentes de varios hospitales dijeron a la agencia indonesia de noticias Antara que la cifra supera los 350, de los cuales muchos han recibido ya el alta.
El ministro de Seguridad, Wiranto, anunció este miércoles la limitación de algunos servicios en las redes sociales, como el envío de fotografías y vídeos en Whatsapp, en determinadas zonas para prevenir la difusión de bulos y una escalada de la violencia.
Widodo ha potenciado durante su mandato la capacidad del Gobierno de combatir noticias falsas en internet, que han sido utilizadas en muchas ocasiones para difamar al mandatario, acusarle de comunista o prochino, o cuestionar su fe religiosa en un país de mayoría musulmana.
Uno de los bulos que circula en las redes sociales acusa a agentes extranjeros chinos de las muertes de manifestantes en los últimos días para incentivar el sentimiento contra la minoría china, que ha sido discriminada y perseguida en Indonesia en el pasado.
Prabobo, quien se niega a admitir la derrota electoral, ha concitado el voto de los islamistas más conservadores, con grupos famosos por tomarse la justicia por su cuenta, que han aumentado en influencia y lideran las manifestaciones antigubernamentales.
La Comisión Electoral de Indonenia anunció el martes la victoria de Widodo con el 55,5 por ciento de los votos, frente al 44,5 por ciento de su rival, en las elecciones celebradas el 17 de abril.