El líder centrista Beny Gantz anunció hoy al presidente, a cuatro horas de que expirara el plazo, su "imposibilidad" de formar gobierno en Israel, en el segundo intento fallido tras Benjamín Netanyahu, lo que abre un periodo político sin precedentes en el país.
"En los últimos 28 días, no he dejado piedra sin mover, independientemente de cuán pequeña era, en mi intento de formar un gobierno que traiga al Estado de Israel liderazgo con integridad, moralidad y valores", aseguró sobre las diferentes opciones que exploró sin éxito, tanto de ungobierno de unidad como uno de coalición.
En un discurso televisado, Gantz responsabilizó al primer ministro en funciones, Netanyahu, del fracaso y reivindicó ser el suyo el partido más votado en las elecciones del 17 de septiembre, que se convocaron tras el bloqueo político de los comicios de abril.
El presidente, Reuvén Rivlin, había recomendado alcanzar un gobierno de unidad, tanto a Netanyahu cuando le dio en un primer momento el mandato, como después a Gantz, que ha tenido casi un mes para intentarlo.
Sin embargo, las negociaciones entre las dos respectivas formaciones, Likud y Azul y Blanco, no prosperaron desde el primer día y quedaron en punto muerto tras el encuentro de los dos líderes en la noche del martes.
LIEBERMAN, DETERMINANTE
El ultraderechista Avigdor Lieberman desveló durante esta jornada que no apoyaría un gobierno de coalición liderado por Gantz con el apoyo "directo o indirecto" de la Lista Unida árabe, lo que dejó al líder centrista pocas opciones para continuar con las negociaciones que, había asegurado, mantendría hasta el último minuto.
Lieberman "culpó" a ambos líderes de que Israel siga sin gobierno. A Gantz por "no aceptar el plan del presidente (que implicaría una rotación en la jefatura iniciada por Netanyahu)", y al primer ministro en funciones por no "renunciar a un gobierno mesiánico y haredí (untraortodoxo)".
También se refirió a estas alternativas como "coaliciones antisionistas" -con árabes o ultraortodoxos-, lo que generó las críticas de todos los partidos políticos.
NETANYAHU PIDE VOLVER A LA MESA DE NEGOCIACIONES
"Estoy dispuesto a entablar un diálogo inmediato con usted, sin condiciones previas, para establecer un gobierno de unidad. Si vamos juntos, tendremos éxito", reclamó Netanyahu poco después del anuncio de Gantz.
El canal 10 de noticias informó además esta noche de que la Fiscalía General del Estado había tomado una decisión con respecto a formalizar o no la acusación de Netanyahu en tres casos de corrupción, que sería anunciada de forma inminente, que podría ser este jueves.
La imputación de Netanyahu ha sido también escollo en las negociaciones, ya que Gantz prometió en campaña que no gobernaría con un acusado.
La decisión final de la Fiscalía influirá en el calendario político de las próximas semanas.
21 DÍAS PARA EVITAR ELECCIONES
Rivlin informará este jueves al presidente del Parlamento de que por primera vez en Israel los dos candidatos han fracasado, y se abrirá un plazo de 21 días para que un diputado de la Knéset consiga el apoyo de 61 legisladores y obtenga así el mandato del presidente para intentar formar un Ejecutivo en dos semanas.
Si no se presenta ninguna opción, el Parlamento es inmediatamente disuelto y se convocarían elecciones.
Gantz dijo hoy que seguirá trabajando durante este plazo para formar "un buen gobierno" con el fin de evitar unas terceras elecciones en menos de un año, y volvió a aludir a un gobierno de unidad.
"Quedan 21 días para lograr una solución democrática. Estos son 21 días fatídicos durante los cuales la democracia en Israel será sometida a su prueba más importante", valoró.